Hoy es una fecha importante en el calendario nacional, porque se conmemora el Día de la Mujer Boliviana, su inefable espíritu de valor y fortaleza la convierten con el ser más importante de la humanidad, pero al mismo tiempo en el bastión de la sociedad en el país.
Durante el corto periodo gubernamental que tuvo la entonces Presidente de Bolivia, Lidia Gueiler Tejada, determinó establecer mediante Decreto el 11 de Octubre como Día de la Mujer Boliviana, en honor al nacimiento de la escritora y poetiza Adela Zamudio Rivero, quien aportó al desarrollo de la cultura nacional en su tiempo.
MUJER
Hablar de la mujer, es tener en la mente un sinfín de ideas que hacen de ella en un ser muy especial. Así como muestran esa delicada figura mediante sus cuerpos esbeltamente tallados, tienen en su alma, un león que cuando se enfurecen son capaces de alcanzar la gloria, con el único fin de defender sus ideales, cuidar a su familia ante cualquier amenaza existente.
La sociedad machista, puso a un segundo plano a la mujer, en tiempos pasados; sin embargo, esa sociedad nunca se dio cuenta del potencial de las mujeres, en cuyo seno se mostró siempre esas ganas de superación.
Ya en tiempos modernos, el rol de la mujer no solo en Bolivia, sino en el mundo entero alcanzó una importancia única, porque al margen de ser el pilar de la familia, también se convertiría en protagonista fundamental de los cambios, políticos, sociales, deportivos, culturales, entre otros.
Aunque el papel de la mujer boliviana, siempre fue preponderante, incluso antes de la Guerra de la Independencia, ya que gracias a su fortaleza se pudo encontrar el sendero de la libertad.
Dicen que detrás de un hombre hay una gran mujer, que en realidad es la mujer quien trabaja para que el hombre destaque en todo ámbito y no precisamente desde el apoyo de la pareja, sino de aquel ser que concibió al sujeto para ser alguien en la sociedad y nos referimos a la madre, quien no escatima esfuerzo alguno para ver a su retoño formado y se convierta en un hombre de bien.
Hoy 11 de Octubre, nuestro sincero homenaje hacia todas las mujeres bolivianas, que sin ellas, este país no tendría vida, porque no solo alegran nuestra mirada con su figura, sino alimentan día a día nuestro espíritu, en pos de construir un destino mejor.
ADELA ZAMUDIO
Adela Zamudio Rivero nació el 11 de octubre de 1854 en la ciudad de Cochabamba. Sus padres fueron Adolfo Zamudio y Modesta Rivero, propietarios de minas en Corocoro, en el departamento de La Paz. Tuvo tres hermanos, Mauro, Arturo y Amadís.
Curso estudios en la escuela católica de San Alberto de Cochabamba, hasta el tercero de primaria, continuó instruyéndose a través de la lectura. A los quince años, publicó su primer poema «Dos Rosas», firmado con el pseudónimo de «Soledad». En 1887, editó su primer libro «Ensayos Poéticos» que tuvo buena acogida por la crítica.
Trabajó como profesora en la escuela donde se había educado. En 1905, fue directora de la Escuela Fiscal de Señoritas, cargo que ostentó hasta 1920. Escribió artículos para El Heraldo de Cochabamba en los que desarrollaba sus ideas progresistas
En 1926, dio su apoyo a la Ley de Divorcio. Pionera del feminismo en Bolivia, en su poema «Nacer Hombre» reflejó la discriminación de que era objeto la mujer. El 28 de mayo de 1926, fue reconocida como la máxima exponente de la cultura boliviana. Falleció el 2 de junio de 1928 a los 73 años, en su tierra natal.