El secretario General de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, mediante una carta comunicó a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), su decisión de no renovar el contrato del brasileño Paulo Abrāo como Secretario Ejecutivo de la organización, debido a decenas de denuncias que existen en su contra.
“Almagro no renovó el contrato de Abrāo en base a más de 60 denuncias sobre su conducta”, dijo una de las fuentes, quien señaló que muchos funcionarios de la CIDH, terminaron yéndose de la institución por esos motivos.
Según la agencia AFP, las quejas contra el brasileño tienen que ver con “acoso laboral” y “manipulación de concursos y contrataciones”.
En enero de este año, la CIDH dijo que por “unanimidad” ya había decidido ratificar al brasileño al frente de la entidad por cuatro años más, pero Almagro comunicó el 15 de agosto, último día de la vigencia contractual de Abrāo, su determinación de abstenerse “de avanzar en el proceso de nombramiento del Secretario Ejecutivo.
Almagro apuntó que la CIDH, a pesar de estar en conocimiento de decenas de denuncias, en algunos casos por meses, no dio traslado de las mismas a la Oficina del Inspector General para su sustanciación, afectando la credibilidad del organismo defensor de los derechos humanos.
“Obviamente, la seriedad y gravedad de las denuncias mencionadas y la necesidad de sustanciar las mismas no ha permitido otorgar el visto bueno correspondiente a esta designación”, señala el comunicado de Almagro respecto a la situación de Abrāo.
CIDH
Por su parte, la CIDH, también mediante comunicado, denunció que la actitud de Almagro es un “grave embate” contra su independencia y autonomía y ratificó su confianza en Abrāo, bajo el argumento de que necesita contar con un “Secretario Ejecutivo que tenga las condiciones y capacidades para consolidar un proceso de transformación y modernización de las labores de la Comisión; que pueda liderar el proceso de conclusión de su Plan Estratégico 2017-2021; así como la construcción de su nuevo plan para el futuro, acorde con su visión para la protección de los derechos humanos en la región”.
Asimismo, criticó la decisión de Almagro de desautorizar a la Comisión como órgano que pueda elegir a su Secretario Ejecutivo y señaló que esa determinación del Secretario General de la OEA desconoce la norma y la práctica vigente.
