El arzobispo de Santa Cruz, monseñor René Leigue, hizo un llamado a los bolivianos para que reflexionen sobre la importancia de asumir la responsabilidad de sus actos. También destacó la necesidad de practicar el perdón como base para lograr la paz tanto interior como social.
Durante su homilía dominical, en el contexto del Día de la Misericordia, enfatizó que no es suficiente exigir comprensión a los demás; es igualmente necesario ofrecerla. Esta invitación a la reflexión busca fomentar un ambiente de empatía y respeto entre las personas.
Mensaje del Papa Francisco
Monseñor Leigue recordó que el Papa Francisco siempre dijo que la misión de los bautizados, que es compartir la buena noticia de la resurrección de Jesús y su presencia viva en el mundo. En sintonía con este mensaje, animó a los fieles a actuar con amor, respeto y responsabilidad hacia los demás.
La importancia del respeto
“Si no respetamos a la persona o no la valoramos por lo que es, no vamos a poder vivir esa paz que el Señor nos ofrece”, manifestó el arzobispo. Esta afirmación resalta la conexión entre el respeto hacia los demás y la paz interior que se puede alcanzar.
Perdón y preocupaciones cotidianas
El arzobispo también remarcó que muchas de las preocupaciones cotidianas no solo provienen de dificultades externas, sino que también se originan en la falta de capacidad para perdonar. Esta falta de perdón puede ser un obstáculo importante para la paz personal y social.
Culpabilidad y responsabilidad
Además, cuestionó la tendencia de algunos sectores de la sociedad a culpar a otros por sus propios problemas, en lugar de reconocer sus errores. Lamentó que, en muchos casos, se responsabilice a personas o grupos por la situación actual, sin admitir culpabilidad por las propias acciones.
Camino hacia la paz
Finalmente, monseñor Leigue reiteró que el camino hacia una paz verdadera requiere una actitud de respeto, valoración y misericordia hacia el prójimo. Este mensaje busca inspirar a los bolivianos a construir una sociedad más justa y compasiva.
LDVY