La madrugada de este sábado 19 de abril, tres derrumbes causados por intensas lluvias afectaron gravemente la nueva carretera Cochabamba–Santa Cruz. Esta situación dejó varios vehículos varados, entre ellos un bus interdepartamental.
Según el informe, el vehículo de transporte interdepartamental quedó atrapado en medio de una mazamorra en el sector conocido como Siete Curvas, en el kilómetro 140. El deslizamiento de lodo y rocas bloqueó completamente la vía, generando una fila de camiones, flotas y vehículos particulares que no pudieron avanzar.
Los pasajeros del bus atrapado lograron evacuar el vehículo antes de que la situación se tornara más peligrosa y se refugiaron en otro punto de la carretera. Testimonios desde el lugar describieron un panorama complicado. Barro espeso, árboles caídos y sectores intransitables obligaron a muchos a caminar por tramos fangosos en busca de comunicación o ayuda.

Reclamos de transportistas
Transportistas y pobladores lamentaron que, a pesar de la conocida vulnerabilidad del tramo, hasta la fecha no se haya completado un trabajo estructural de estabilización en la vía por parte de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC).
“Lamentablemente no es la primera vez. Cada que llueve tenemos esta dificultad para transitar. Mucha gente, turistas, están siendo perjudicados”, expresó un conductor afectado, según citó Red Uno.

Obras inconclusas en la zona
Los afectados también denunciaron que las obras en la zona quedaron inconclusas, lo que agravó la situación. Además, recordaron que este punto de la carretera ya fue escenario de un accidente trágico en meses pasados, donde una familia entera perdió la vida, por lo que reclaman una solución definitiva.
Tráfico interrumpido
Según medios locales, el tráfico entre Cochabamba y Santa Cruz permanece interrumpido y las autoridades aún no emitieron un informe oficial sobre las tareas de limpieza ni el tiempo estimado para restablecer la circulación.