Desde este jueves, 17 de abril de 2025, actuar en la plaza de Leicester Square, que es el centro neurálgico de las artes escénicas en Londres, está prohibido y se considerará un delito. Esta decisión se tomó tras quejas de los vecinos y un fallo judicial que ha impactado negativamente a los artistas callejeros.
El 26 de marzo, un juez del Tribunal de Magistrados de la City de Londres dictó que se debía poner fin al `busking`, que son las actuaciones en la calle, en este icónico lugar. El juez argumentó que el ruido constante de los conciertos podría ser una “tortura psicológica” para los residentes y negocios cercanos, como Global Radio, que presentó la denuncia.
Decisión del ayuntamiento
Este fallo obligó al ayuntamiento del distrito londinense de Westminster, que abarca gran parte del centro de la capital, a suspender desde el 17 de abril de 2025 las dos zonas que habían sido designadas para las actuaciones en Leicester Square. Desde el gremio de artistas, esta medida se considera un nuevo intento de expulsarlos de las calles.
El Westminster City Council implementó un sistema de licencias para el entretenimiento callejero en abril de 2021. Desde entonces, ha reducido en un 90% los espacios permitidos para actuar en el centro de Londres y ha enjuiciado a alrededor de 20 artistas, algunos de los cuales enfrentan sanciones de hasta 2,500 libras (más de 2,900 euros) y cargos criminales por no cumplir con el reglamento.
Protestas de los artistas
Como forma de protesta, un grupo de músicos se reunió el miércoles para cantar, posiblemente por última vez, en la plaza. Portaban pancartas con mensajes que destacaban que las actuaciones callejeras no son un crimen. También pedían al ayuntamiento de Westminster que dejara de “matar” la cultura y acusaban a Global Radio de “silenciar” a los artistas.
“Me gano la vida parcialmente cantando en la calle, así que esto significa que va a ser un poco más difícil para mí poder alimentar a mi hijo”, comentó a EFE el `busker` Nick Howe. Expresó su descontento por cómo se tomó esta decisión, sin negociar con los músicos y sin ofrecer una solución alternativa a la suspensión de las actuaciones.
Declaraciones del ayuntamiento
El portavoz del Ayuntamiento de Westminster, Matt Noble, aseguró la semana pasada en un comunicado que el cierre de los puestos de Leicester Square no significa que se prohíban los `buskers` en el distrito. Noble indicó que esta decisión fue provocada por el reciente fallo judicial.
“Los artistas callejeros son una parte muy querida de la identidad de nuestra ciudad, pero también debemos equilibrar esto con el deber de proteger a los residentes y los negocios”, afirmó Noble.
Impacto en los artistas
Sin embargo, Howe considera que esto es una “campaña coordinada para acabar con el arte en la ciudad”. Esta nueva prohibición, que incluye “multas, la confiscación de equipos o incluso la retirada de la licencia para los artistas que infrinjan la norma”, también afecta a las estatuas humanas, a pesar de que la queja principal se centra en el volumen de la música.
Entre las figuras cinematográficas de Mary Poppins, Harry Potter o Mr. Bean que rodean la emblemática plaza de Leicester Square, a partir de hoy faltará la de Tommy, de 45 años y de origen rumano. Tommy había estado dando vida a personajes como Charlie Chaplin en Leicester Square durante 10 años para el deleite de los turistas.
“Me dijeron que yo también me tenía que ir porque, si me quedaba aquí, alguien iba a venir a cantar o a actuar a mi lado y a hacer ruido”, explica Tommy. Reconoce que tener que abandonar su puesto habitual, sin saber dónde podrá seguir trabajando, le está afectando “física y psicológicamente”.
Despedida de los nuevos artistas
En las mismas calles que un día vieron nacer a estrellas como Ed Sheeran o Rod Stewart, las nuevas generaciones de `buskers` londinenses se despidieron a ritmo de “Skyfall” de Adele. La estrofa en la que dice “cuando todo se desmorone, vamos a mantenernos de pie y enfrentaremos todo juntos” cobró un nuevo sentido en sus voces.