La Dirección Departamental de la Policía Forestal y de Preservación al Medio Ambiente (Pofoma) de Cochabamba está llevando a cabo una investigación sobre un posible caso de biocidio. Este incidente ocurrió el domingo 13 de abril en la zona conocida como Cruce Taquiña, donde se encontraron dos perros envenenados. Se sospecha que este acto podría formar parte de un nuevo método utilizado por delincuentes para ingresar a las casas y cometer robos.
El director departamental de Pofoma, Edson Coca, explicó que este tipo de práctica se atribuye a los llamados “monrreros”. Estos delincuentes eliminan previamente a los perros guardianes para facilitar su entrada a las viviendas. La denuncia fue presentada por un ciudadano que proporcionó imágenes de cámaras de seguridad, en las que se observa a un hombre dejando un alimento frente a un domicilio.
Detalles del envenenamiento
Los perros, de raza Yorkshire, fueron hallados sin vida y presentaban espuma en el hocico, un signo característico de envenenamiento. Personal de Pofoma se trasladó al lugar para realizar el levantamiento de los cadáveres y recopilar evidencias que puedan ayudar en la investigación.
Acciones legales y sanciones
El caso ha sido remitido al Ministerio Público por el delito de biocidio, que en Bolivia se sanciona con penas que oscilan entre 2 y 5 años de prisión. Además, se notificó a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) para que continúe con la investigación y logre identificar a los responsables de este acto.
Protección de los animales
El director departamental hizo un llamado a la población, recordando que los animales son seres vivos que cuentan con protección legal. También instó a la comunidad a denunciar cualquier caso de maltrato o actos de crueldad ante las autoridades competentes.
LDVY