Una niña boliviana de 8 años fue rescatada en la ciudad de Rengo, en la región de O’Higgins, Chile, tras haber sido víctima de trata de personas. Según un reportaje del medio chileno T13, la menor era forzada a realizar trabajos domésticos, no asistía a la escuela y vivía en condiciones de abandono.
Detalles del rescate
De acuerdo con el informe chileno publicado este jueves 10 de abril, la menor fue vendida por su abuela a una pareja, también de nacionalidad boliviana, por 350.000 pesos chilenos, que equivalen a aproximadamente 350 dólares. La pequeña residía en un campamento de bolivianos, ubicado cerca del río Claro.
El fiscal jefe de Rengo, Osvaldo Yáñez, explicó que la niña debía levantarse a las 04:00 horas para comenzar su jornada de labores en el hogar donde fue retenida. Se encargaba de barrer, hacer las camas, lavar los platos y realizar otras tareas del hogar, sin acceso a educación, salud ni alimentación adecuada.
Condiciones de vida
En ocasiones, como forma de castigo, se le negaba comida o era obligada a dormir a la intemperie. La situación fue descubierta gracias a una vecina del campamento donde vivía la niña, quien alertó a las autoridades al notar señales de maltrato físico. Fue esta mujer quien la rescató y la llevó a la ciudad de Santiago para buscar ayuda.
Se ha informado que la menor no estaba inscrita legalmente ni en Chile ni en Bolivia. “Ella podía haber desaparecido y nadie se daba cuenta”, lamentó la subprefecta de la Brigada de Trata de Personas de Chile, Elena Hidalgo, quien afirmó que la niña sufrió maltrato físico y psicológico de manera constante.
Reacción de las autoridades
Durante el proceso de custodia, la abuela de la niña se presentó ante las autoridades para reclamarla, momento en el que admitió haberla vendido, tratando el asunto como algo normal dentro de la familia. Tanto la abuela como la pareja que compró a la niña se encuentran bajo custodia policial y enfrentan cargos por el delito de trata de personas con fines de servidumbre.
Varias autoridades chilenas han condenado este hecho. La diputada representante de la región de O’Higgins, Carla Morales, presentó un oficio al Ministerio de Desarrollo Social y Familia, a la Subsecretaría de la Niñez y al Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, solicitando información urgente sobre las medidas para proteger a niños migrantes que viven en campamentos.
Reflexiones sobre la situación
Morales calificó el hecho como un reflejo de un grave vacío en la protección de los derechos de la infancia migrante. “Es inconcebible que en pleno siglo XXI sigamos enfrentando situaciones tan brutales como esta, donde una niña es vendida por su propia abuela y expuesta a violencia, explotación y abandono total”, señaló la diputada.
Además, advirtió que esta situación no es aislada y mencionó la existencia de otros casos similares, como cuando un hombre intentó cruzar la frontera con un niño que no era su hijo.