La mano del periodista de Televisión Universitaria (TVU) de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, Milton Montero, fue aprisionada con violencia por un guardia de seguridad de la Gobernación de Santa Cruz con la finalidad de provocar dolor e impedir que grabe imágenes con un teléfono móvil desde un resquicio del portón de la entidad estatal.
La agresión fue repetida en tres oportunidades en la mañana del día jueves 3 de abril, y el propósito del agresor, que cumplía órdenes del edecán del gobernador, Mario Aguilera, era obstruir el trabajo de los periodistas convocados por la propia Gobernación para presenciar la visita de la ministra de la Presidencia María Nela Prada, relató Montero a la Unidad de Monitoreo de la ANP.
Tras la llegada de Prada a la Gobernación, los periodistas buscaron espacios entre la puerta y la reja para grabar el ingreso de la ministra. El portón fue cerrado bruscamente por el guardia que luego intentó lesionar la mano de Montero que portaba un teléfono móvil con el que registraba imágenes.
¿Por qué se agredió a la prensa después que la propia Gobernación los llamó?, se pregunta Montero y otros reporteros que cubren habitualmente la entidad.
El periodista Montero y la Asociación de Periodistas de Santa Cruz (APSC) enviaron cartas de queja al despacho del gobernador Aguilera.
“Cada una de esas trabas que dificultan e impiden que cumplamos con nuestra tarea de informar a la población son violaciones al derecho a la libertad de prensa que ampara a nuestro gremio y, a la vez, al de libertad de expresión, un derecho compartido con toda la población. No se trata, por lo tanto, de un problema que afecte e importe solo a los trabajadores de la prensa”, señala una carta de los periodistas cruceños.
“Reiteramos: estas acciones violentas en contra de los trabajadores de la prensa, han dejado de ser gajes del oficio. Responden a una perversa receta de quienes detentan el poder, a los que les incomoda la fiscalización de sus actos”, señala la APSC.
La Unidad de Monitoreo de la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) reporta agresiones a periodistas y medios desde hace 17 años, y sus noticias están destinadas a la difusión en medios informativos. La organización desaprueba toda forma de apropiación de datos e imágenes destinada a informes de ONG y fundaciones en Bolivia, sin autorización previa.