Un camión cisterna boliviano volcó el 18 de marzo de 2025 en el Parque Nacional Lauca, Chile, derramando más de 10.000 litros de diésel en la Quebrada Taipicahue. El conductor fue detenido por Carabineros en estado de ebriedad. Mientras tanto, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) ha comenzado un monitoreo para evaluar el impacto ambiental de este incidente.
El accidente ocurrió en el kilómetro 141 de la ruta internacional 11 y ha generado un impacto significativo en la biodiversidad de esta área protegida, que es administrada por CONAF. Los bomberos actuaron rápidamente construyendo piscinas de contención, pero el hidrocarburo logró alcanzar un afluente de agua. “El primer bombazo de contaminación fue crítico”, comentó Esteban Zúñiga, guardaparques de CONAF.
Monitoreo del impacto ambiental
La institución llevará a cabo un monitoreo integral para evaluar el daño en la flora y fauna de la región. Lino Antezana, director regional de CONAF, ha exigido regular el tránsito de camiones bolivianos, señalando que “no hay seguros que respondan por estos daños ambientales”. El camión cisterna había cargado combustible en los días previos para trasladarlo al país, en medio de una escasez que afecta a varios sectores.
Riesgos para el agua potable
José Miguel Huanca, delegado presidencial de Parinacota, ha descartado riesgos para el agua potable, ya que la fuente de abastecimiento es independiente. Sin embargo, se están analizando posibles afectaciones a los canales agrícolas. De acuerdo con información del portal chileno Agro Chile, se están realizando turnos para evitar el robo del carburante.
Consecuencias legales
El conductor del camión ha sido puesto a disposición del Ministerio Público chileno. Por su parte, Yacimientos Fiscales Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) no se ha pronunciado al respecto, pero este incidente podría alterar la logística de distribución de carburantes por parte de la empresa estatal.
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