La Confederación Nacional de Choferes de Bolivia ha dado un plazo de 72 horas al Gobierno para que aborde la escasez de diésel y gasolina, así como la situación de las carreteras. Esta decisión fue tomada durante un ampliado que se llevó a cabo en Sucre.
Entre las solicitudes más importantes, se encuentra la destitución de varias autoridades. Los choferes piden la renuncia del presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen; del director de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), Marcel Claure; y del viceministro de los Derechos del Usuario y del Consumidor, Oscar Silva.
Si el Gobierno no cumple con estas demandas, el sector de choferes ha anunciado que iniciará un paro indefinido. Esta información fue proporcionada el reciente lunes por el secretario general de la Confederación Nacional de Choferes de Bolivia, Lucio Gómez.
Medidas adicionales
Además del paro, los choferes han decidido no pagar los peajes en las carreteras. Cada departamento tendrá la libertad de determinar en qué momento implementará esta medida, considerando el estado de los caminos que complican el transporte y la falta de presupuesto para repararlos.
Reducción de salarios
Los dirigentes han señalado que desde Chuquisaca se exige que las autoridades de YPFB, ABC y otras instituciones del Gobierno reduzcan sus salarios en un 50%. Esta solicitud refleja la preocupación del sector ante la situación actual y la necesidad de acciones efectivas por parte del Gobierno.