Bolivia y Colombia han acordado compartir información académica y científica sobre la hoja de coca. Este compromiso se formalizó en un encuentro que tuvo lugar en Viena, Austria, entre el Vicepresidente boliviano, David Choquehuanca, y la ministra de Justicia colombiana, Ángela María Buitrago.
Ambos gobiernos han expresado que «la hoja de coca, en su estado natural, no es dañina, no produce dependencia ni síndrome de abstinencia, y carece de toxicidad para el ser humano». Este esfuerzo conjunto tiene como objetivo proporcionar a la Organización Mundial de la Salud (OMS) datos científicos que respalden la reclasificación y el reconocimiento de la hoja de coca.
Objetivos de la reunión
Juan Carlos Alurralde, Secretario General de la Vicepresidencia, participó en la reunión y compartió información sobre este objetivo. En este contexto, Bolivia y Colombia han manifestado su respeto hacia los pueblos originarios y la sabiduría ancestral de las comunidades indígenas que han mantenido conocimientos sobre la hoja de coca.
Enfoque basado en evidencia
Este compromiso refleja una intención más amplia de ambos países por promover un enfoque fundamentado en evidencia científica respecto a la hoja de coca. La colaboración entre Bolivia y Colombia podría tener implicaciones significativas en las políticas relacionadas con el uso y tratamiento de esta planta en el ámbito internacional.