El covid-19 ha dejado a un 10% de las personas infectadas con síntomas persistentes, lo que afecta su calidad de vida y su capacidad para trabajar. Entre los afectados se encuentran Eliana Souza do Nascimento, una brasileña de 64 años que vive en Manaos y depende de oxígeno, y Sandra Guerrero, una profesora de guitarra en Francia que ha sido diagnosticada con invalidez laboral del 75%. La falta de tratamientos específicos y el reconocimiento oficial de esta condición agravan la situación de estos pacientes.
El caso de Eliana Souza
Eliana Souza do Nascimento contrajo la enfermedad durante la pandemia y la fibrosis pulmonar que le causó la enfermedad la obliga a estar las 24 horas del día conectada a una botella de oxígeno. “Yo era una persona muy activa, me gustaba trabajar, nunca paraba, ni siquiera en casa ni en el trabajo. Me pegó durísimo”, expresó. Esta mujer tiene el 80% de sus pulmones afectados y depende de su marido para ir al baño, ducharse y realizar cualquier actividad. Las facturas del hospital han generado deudas significativas.
Estadísticas sobre el covid persistente
Las últimas estimaciones indican que aproximadamente 1 de cada 10 personas que tuvo el virus podría desarrollar covid-19 persistente. “Los pocos estudios clínicos existentes indican que (…) algunas personas pueden mejorar con el tiempo, otras permanecen con deficiencias estables, otras fluctúan y otras tienen empeoramientos con el tiempo”, explicó Jacqueline H. Becker, profesora asistente de la Escuela Icahn de Medicina en Monte Sinaí, Nueva York.
La experiencia de Sandra Guerrero
Sandra Guerrero es parte de los 2.06 millones de enfermos de covid persistente diagnosticados en Francia. Se contagió en un viaje a Guatemala en octubre de 2020 y tuvo que esperar 14 meses para recibir un diagnóstico. “Por una parte, fue un alivio porque era mucho tiempo errando de médico en médico. Pero por otro, preocupa, porque no sabes cuándo se pasará la enfermedad”, indicó Guerrero. Actualmente, tiene una invalidez laboral del 75% debido al cansancio persistente que sufre.
Factores de riesgo del covid persistente
El covid-19 persistente es más frecuente en mujeres, poblaciones negras o étnicas y personas con otras condiciones médicas. También es más común en países donde hubo más casos durante la pandemia. “Los esfuerzos para abordar la covid prolongada deben seguir centrándose en el reconocimiento y la educación (por ejemplo, campañas de salud pública) para promover la concienciación y reducir el estigma”, indicó Becker.
Reconocimiento y tratamiento de la enfermedad
Algunos gobiernos están comenzando a reconocer esta condición como discapacidad; sin embargo, muchos casos no son diagnosticados o reconocidos. No existe una terapia disponible específicamente para el covid persistente, aunque se pueden utilizar tratamientos para aliviar los síntomas. “La investigación médica está avanzando, pero no habrá un tratamiento dentro de poco. No obstante, la dolencia se va comprendiendo un poco mejor y tengo la esperanza de que llegue un tratamiento”, manifestó la paciente francesa.
La medicación necesaria para tratar los síntomas puede costar hasta 3,500 dólares mensuales, lo que representa una carga económica considerable para muchas familias afectadas por esta condición crónica.
