El principal sospechoso del asesinato de Marupa, un indígena leco y defensor del medio ambiente, fue detenido la noche del 14 de febrero en la comunidad de Torewa. Este ataque ocurrió el lunes anterior y dejó a la víctima con un traumatismo craneoencefálico debido a machetazos. La Central Indígena del Pueblo Leco de Apolo (CIPLA) ha denunciado el asedio de grupos ilegales en la zona y exige una investigación exhaustiva sobre este crimen.
La detención se llevó a cabo tras la información de que el hecho sucedió el pasado lunes y que la muerte fue provocada por machetazos, aunque estos datos están sujetos a confirmación en la autopsia. Se menciona que habría al menos 2 responsables. Según los informes iniciales, el detenido se atribuyó el crimen, afirmando: «Me enviaron a matarlo». Sin embargo, los reportes indican que hay contradicciones en su declaración.
Traslado del sospechoso
Una comisión trasladó al presunto culpable junto con el cuerpo de Marupa desde Torewa hasta el municipio de Reyes, en el departamento de Beni. De manera preliminar, los medios de comunicación de Beni informaron que el traumatismo craneoencefálico fue la causa de la muerte.
La CIPLA lamentó profundamente el asesinato, declarando: “No solo mataron a un indígena leco, también mataron a un defensor de la naturaleza, de nuestra Madre Tierra”. La organización ha denunciado el asedio que han sufrido durante años por parte de grupos ilegales que trafican con tierras para destinarlas a la minería ilegal y otras actividades criminales dentro del área protegida nacional Parque Madidi.
Incendios en la amazonía
Desde 2023, los reportes de incendios han mostrado cómo las llamas están afectando la amazonía boliviana, especialmente en el norte paceño y en Beni. Esto coincide con el avance de la minería y la agricultura en la región. La Central de Pueblos Indígenas de La Paz (CPILAP) envió una carta al presidente Luis Arce y a otros funcionarios, informando sobre el asedio que están sufriendo algunas comunidades.
La CIPLA demanda que se investigue la muerte de Marupa y que se identifique a los autores, así como que se procese a las mafias criminales que son los responsables intelectuales del crimen. Además, exigen garantías estatales necesarias para proteger su territorio indígena titulado y sus recursos naturales.
Crimen asociado a extractivismos
El vicepresidente de la CPILAP, Lino Illimuri, indicó que coincide en señalar que el crimen está relacionado con los extractivismos. Reveló que hay varias cooperativas intentando ingresar a la zona para explotar oro. Su organización está trabajando para hacer valer una acción popular que evite el avance de la minería ilegal en los ríos del norte del país.
La CPILAP se pronunció enérgicamente repudiando el hecho y exigiendo garantías para el pueblo leco. “Exigimos a las autoridades tomar cartas en el asunto para la debida investigación de estos hechos”, reza su comunicado. En 2018, el entonces ministro de Minería, César Navarro, aseguró que no se otorgarían permisos en Madidi; sin embargo, la minería ilegal avanza sin autorización ni medidas efectivas por parte de las autoridades.
Defensa de los guardaparques
Este sector ha llegado a procesar a guardaparques que intentaron interponerse en este avance. En esa ocasión, los guardaparques debieron defenderse con sus propios recursos y el apoyo de colectivos ambientales, sin recibir respaldo del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap).