Los ciudadanos suizos están convocados a votar este domingo 9 de febrero en un referéndum que presenta una propuesta ambiciosa y pionera en el mundo desarrollado. Esta iniciativa busca limitar el crecimiento económico para que no consuma más recursos de los que el planeta puede regenerar de manera natural.
Este referéndum es uno de los muchos que Suiza, el país con mayor democracia directa del mundo, organiza tres o cuatro veces al año. La propuesta surge de la sección juvenil de Los Verdes, que es la quinta fuerza parlamentaria en el país. Si se aprueba, implicaría una modificación de la Constitución Federal, que no ha sido enmendada en los últimos 25 años.
Propuesta de enmienda constitucional
La enmienda que se propone añadiría a la Constitución helvética que «las actividades económicas no pueden utilizar recursos ni emitir contaminantes por encima de las bases naturales en las que la vida pueda conservarse». Además, se exigiría que en un plazo de 10 años, el impacto medioambiental del consumo en Suiza «no supere los límites planetarios» en relación con la población nacional.
Esto abarcaría aspectos como el consumo de agua, la utilización del suelo y las actividades que afectan el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. En términos prácticos, la iniciativa sugiere que este cambio constitucional obligaría a Suiza a reducir en un 90 % el impacto medioambiental de sus emisiones de gases de efecto invernadero, o en un 75 % el impacto en biodiversidad, según estudios de la Oficina Federal del Medio Ambiente.
Postura del Gobierno y el Parlamento
El Gobierno suizo ha recomendado votar en contra de la iniciativa, advirtiendo que su implementación podría llevar a prohibiciones y limitaciones que «reducirían fuertemente el consumo, debilitarían la economía y provocarían un encarecimiento de numerosos productos y servicios».
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El Parlamento nacional también se mostró mayoritariamente en contra, con 133 votos en la Cámara Baja frente a 61 a favor y una abstención. Las autoridades han alertado, en un boletín informativo enviado a los votantes antes de la consulta, que la adopción de la iniciativa podría afectar las relaciones comerciales de Suiza con otros socios y sus obligaciones ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) al introducir «reglamentaciones radicales».
Argumentos a favor de la iniciativa
Los defensores de la propuesta argumentan que esta «busca mejorar el bienestar y la salud de los seres humanos». Además, sugieren que, si se aprueba, se implementen medidas que sean «socialmente aceptables».
Estudios medioambientales han indicado que si la población mundial adoptara el mismo estilo de vida que el ciudadano suizo promedio, el «límite ecológico anual» del planeta se agotaría en los primeros 4 meses del año. Después de ese período, se estaría consumiendo más de lo que la Tierra puede regenerar.
Fuente: EFE.