El Gobierno nacional ha confirmado que el precio del pan de batalla se mantendrá en 0,50 centavos. Esta información fue proporcionada por Franklin Flores, gerente general de la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa). Aunque se esperaba que hoy se llevara a cabo una reunión entre las autoridades gubernamentales y representantes de la Confederación Nacional de Panificadores Artesanos de Bolivia (Conapabol) para discutir este tema, Flores indicó que el encuentro se realizará en una fecha posterior.
Reunión pospuesta
Flores declaró: “Estamos trabajando, haciendo números para que el Estado tampoco llegue a ser afectado, pero el resultado final será el pan a 0,50 centavos”. El 7 de enero, el viceministro de Comercio y Logística Interna, Grover Lacoa, había informado que las autoridades del Gobierno y los representantes de Conapabol se reunirían este jueves para discutir un acuerdo sobre el precio del «pan de batalla».
No obstante, Flores aclaró que este encuentro no se llevará a cabo en la fecha prevista. “La agenda suscrita era para mañana (hoy jueves). Entiendo que ya se han generado consensos en fechas posteriores, pero se resolverá de manera urgente lo más rápido posible este tema de la entrega de harina y el costo del pan de batalla”, afirmó.
Demandas del sector panificador
El sector panificador ha solicitado un aumento en el costo del pan. En respuesta a esta situación, el Gobierno está replanteando esa propuesta con el objetivo de generar consenso y mantener un precio estable. “El fin del Gobierno es que el precio sea invariable, se sostenga a 0,50 centavos. Entonces vamos a ver qué otras alternativas más podemos agregar para llegar a conclusiones finales”, remarcó Flores.
Entrega de harina
Además, Flores aclaró que Emapa entrega al sector panificador harina para la elaboración del pan de batalla, y no para pan especial. “Nosotros no podemos definir el precio del pan especial; es una decisión que maneja cada panificador industrial”, señaló.
Tensiones entre productores y autoridades
La situación actual refleja las tensiones entre los productores y las autoridades sobre los costos operativos y la necesidad de asegurar un suministro adecuado mientras se mantiene un precio accesible para los consumidores.
