El glaciar de la Marmolada, que es el más grande del macizo alpino de las Dolomitas en el norte de Italia, ha perdido 70 hectáreas de su superficie en los últimos 5 años debido a la crisis climática. Según un estudio realizado por un grupo de científicos, este glaciar podría desaparecer para el año 2040. Esta información fue divulgada el lunes 9 de septiembre.
Vanda Bonardo, dirigente de la asociación Legambiente y presidenta de la Comisión Internacional para la Protección de los Alpes (CIPRA), expresó en un comunicado que «los Alpes son un lugar fundamental, pero cada vez más frágil por una crisis climática que avanza». La Marmolada se presenta como un claro ejemplo de un glaciar en estado de muerte inminente.
Durante los últimos 5 años, estas dos organizaciones han estado llevando a cabo la iniciativa conocida como `Caravana de los glaciares`. Este proyecto reúne a expertos, científicos y montañistas con el objetivo de monitorear la situación de estos «gigantes blancos» que se encuentran en las cumbres de las montañas italianas.
Coma irreversible
En la edición actual de la Caravana, que concluyó el mismo lunes, se alertó sobre el estado de «coma irreversible» en el que se encuentra el glaciar de la Marmolada, el más grande de las Dolomitas italianas. Según los datos recopilados, la crisis climática y el aumento de las temperaturas han provocado que el glaciar haya perdido 70 hectáreas de superficie solo en los últimos 5 años. Desde 1888, ha retrocedido 1.200 metros.
Además, los expertos están preocupados por la reducción del espesor de la superficie helada, que ha mostrado picos de pérdida de hasta 10 centímetros diarios. «A este ritmo, para el año 2040 el glaciar de la Marmolada ya no existirá», advierten los científicos.
Derrumbe y tragedia
Este enorme bloque de hielo ya había mostrado su vulnerabilidad cuando en julio de 2022 ocurrió un derrumbe que resultó en la muerte de 11 personas. Este incidente subraya la fragilidad del glaciar y la urgencia de abordar la crisis climática.
Problemas adicionales
El estado del glaciar se ve agravado por otros problemas, como la presencia de microplásticos y basura en la zona. También se ha señalado que hay estaciones de esquí cerradas cuyas instalaciones aún no han sido desmanteladas, lo que contribuye a la situación crítica del glaciar, según informaron Legambiente y CIPRA.