En Potosí, Bolivia, la Comisión de Naciones y Pueblos Originarios Indígena Campesinos de la Cámara de Diputados se vio impedida de subir al Cerro Rico de Potosí para verificar el peligro inminente de desplome de este Patrimonio de la Humanidad. La Corporación Minera de Bolivia (Comibol) y los cooperativistas mineros fueron los responsables de esta obstrucción.
La Comisión, encargada de la fiscalización, se trasladó hasta el Cerro Rico tras recibir denuncias alarmantes sobre hundimientos cada vez más frecuentes en este importante patrimonio histórico. Sin embargo, al llegar al lugar, los legisladores se encontraron con una situación tensa generada por los mineros cooperativistas, quienes les impidieron continuar con su recorrido.
Tensión y amenazas en el Cerro Rico
El diputado de Creemos, Erwin Bazán, relató que los mineros amenazaron con agredir físicamente a los legisladores e incluso detonaron dinamitas como muestra de intimidación. Exigieron que se retiraran del lugar, impidiendo así que la Comisión pudiera llevar a cabo su labor de verificación del estado del Cerro Rico.
Esta situación no solo pone en riesgo el patrimonio histórico y cultural del Cerro Rico, sino también la seguridad de aquellos que intentan velar por su conservación.