Una mujer embarazada de 33 años perdió la vida en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) debido a la negativa de su comunidad religiosa a buscar atención médica. A pesar de presentar síntomas graves como dolores abdominales, convulsiones y hemorragias, la paciente no recibió la ayuda necesaria y tanto ella como su bebé fallecieron.
Este trágico suceso tuvo lugar en el Hospital Materno German Urquidi, ubicado en Cochabamba. Según el director del hospital, José Antonio Pardo, los pastores de la comunidad ejercieron una fuerte influencia en la decisión de no buscar atención médica especializada, optando en su lugar por oraciones.
Demora en la llegada al hospital y consecuencias devastadoras
A pesar de los síntomas graves que presentaba, la mujer embarazada solo fue llevada al hospital cuando su estado era crítico. Esta demora resultó en una infección no tratada que provocó su fallecimiento, así como el del bebé. La falta de intervención médica oportuna pone de manifiesto las consecuencias devastadoras que pueden surgir al priorizar creencias religiosas sobre la salud física.
Siete niños quedan huérfanos por negligencia médica
Como resultado de esta tragedia, siete niños quedaron huérfanos. Este caso resalta la importancia de buscar ayuda profesional ante emergencias médicas durante el embarazo, dejando en evidencia las graves consecuencias que puede tener la negligencia en la atención médica.