El exdirector ejecutivo y jefe de operaciones de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Yasuo Mori, fue declarado culpable por el Tribunal de Distrito de Tokio. Según la sentencia del juez Kenji Yasunaga, Mori «tomó la iniciativa en la manipulación de licitaciones entre los operadores, aprovechando su influencia como ejecutivo». Como resultado, se le condena a dos años de prisión, suspendida a cuatro en libertad vigilada.
El fallo judicial reveló que Mori manipuló las licitaciones para organizar eventos de prueba y competiciones olímpicas por un valor total de 43.700 millones de yenes (unos 280 millones de euros). Se coordinó con altos cargos y personas vinculadas a la agencia de publicidad Dentsu para elaborar una lista preferencial para asignar las licitaciones. Su papel central en este plan ha sido destacado en la sentencia.
Obstáculos a la competencia justa
La sentencia destacó que las acciones de Mori obstaculizaron considerablemente la competencia libre y justa en los concursos públicos. Aunque reconoció que no buscaba un beneficio personal, subrayó las importantes sumas involucradas en el caso.
Mori admite cargos por interés olímpico
Durante el proceso judicial, Mori admitió los cargos y afirmó haber actuado movido por el interés del éxito de los Juegos Olímpicos.
Este caso sobre las licitaciones se suma a otros procesos abiertos por supuestos sobornos relacionados con los Juegos Olímpicos celebrados en el verano pasado. Estas situaciones han afectado negativamente al legado del evento deportivo y han repercutido en otros eventos relacionados.
Sentencia contra Mori antes de juicio clave
La sentencia contra Mori se produce dos días antes del inicio del juicio contra la figura clave en el caso de los sobornos, donde se investigan supuestos pagos a cambio de patrocinios y otros contratos relacionados con los Juegos. En este caso, están involucradas importantes empresas nacionales como la cadena de tiendas Aoki o la editorial Kadokawa.
Fuente: EFE
