Volvo, el icónico fabricante sueco de automóviles, marcó un hito trascendental en la industria automotriz al anunciar su retirada definitiva de los motores diésel. Tras 45 años de liderazgo en la producción de vehículos diésel, la marca tomó la decisión de comprometerse con la electrificación y la movilidad sostenible.
Este anuncio, que fue insinuado hace algunos años, se materializó con la firma sueca enfocándose en su estrategia de electrificación y comprometiéndose a ofrecer exclusivamente vehículos híbridos enchufables (PHEV) y eléctricos en su gama a partir de 2024.
Pioneros en movilidad sostenible
Volvo fue pionera en respaldar las decisiones de la Unión Europea en materia de movilidad, abrazando la transición hacia los vehículos eléctricos y aceptando los desafíos de las nuevas normas de emisiones Euro 7. La marca convirtió la electrificación en su estandarte, y esta primera gran decisión confirma su compromiso con un futuro de movilidad más limpio y sostenible.
Foco global en electrificación
A partir del principio del año 2024, Volvo dejará de montar motores diésel en sus vehículos, una medida que se anunció por primera vez en 2016 con el lanzamiento del modelo S60. Esta resolución no se limita al mercado europeo; es aplicable a todos los mercados globales donde Volvo tiene presencia. La compañía está convencida de que la electrificación, especialmente los PHEV y los vehículos eléctricos, es la solución para abordar el problema global de las emisiones.
El futuro es eléctrico
El director ejecutivo de Volvo Cars, Jim Rowan, afirmó: «Los sistemas de propulsión eléctricos son nuestro futuro y son superiores a los motores de combustión: generan menos ruido, menos vibraciones y menores costos de mantenimiento para nuestros clientes, además de cero emisiones del tubo de escape. Estamos totalmente enfocados en crear una amplia cartera de vehículos premium totalmente eléctricos que cumplan con todas las expectativas que nuestros clientes tienen sobre un Volvo y será una parte clave de nuestra respuesta al cambio climático.»
Fin a medio plazo para motores de combustión interna
Esta decisión de Volvo no solo afecta a los motores diésel, sino que también marca el comienzo del fin a medio plazo de los motores de gasolina, ya que la empresa anunció que no destinará más recursos a la investigación y desarrollo para nuevos motores de combustión interna.
