El 5 de septiembre se cumplieron seis años del «caso mochilas» en contra del exalcalde de Oruro, Edgar Bazán y otras 20 personas más, presuntamente involucradas en delitos de corrupción. Actualmente, la causa penal se encuentra en etapa de juicio oral, público y contradictorio.
El principal querellante, Severo Tórrez, lamentó que durante estos años haya pasado por una viacrucis con difamaciones, calumnias y persecución política judicial. Atribuye todo esto a un complot político por parte del exburgomaestre.
Después de seis años desde que se hizo pública la querella del «caso mochilas», Tórrez informó que ahora el caso se encuentra en la última etapa. Está prevista la continuidad del juicio oral el 13 de septiembre en el Juzgado Sentencia en lo Penal Nº 4.
“Por suerte estamos en la última etapa. Esperemos que las autoridades judiciales esta vez no permitan más suspensiones. Queremos saber quiénes son los autores intelectuales y materiales y deben ser sancionados porque este caso no es un hecho particular ni aislado. Se están investigando hechos de corrupción relacionados con una exautoridad”, aseveró.
Acusaciones falsas contra el querellante
Tórrez es acusado por los vecinos de la Junta Vecinal Comibol Rumy Campana, quienes exigen su retiro del mercado que lleva el mismo nombre. Sostiene que este es un “grupo de choque” creado por Bazán en 2017 como venganza.
“Estas acusaciones y difamaciones siempre han venido o se han armado por Edgar Bazán como venganza y represalia. Todo esto es ejecutado a través de su grupo de choque que ha creado en Rumy Campana desde 2017 hasta la fecha”, refirió.
Delitos relacionados con mochilas chinas
El Ministerio Público acusó a 21 personas, entre exfuncionarios y actuales del Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO). Bazán es el principal sindicado por los delitos de incumplimiento de deberes, contratos lesivos al Estado, uso indebido de influencias, negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas y conducta antieconómica.
La investigación penal se inició luego de la entrega de más de 91 mil mochilas chinas a estudiantes en la gestión 2016. Estas debían ser confeccionadas en Oruro, pero aparentemente fueron compradas en el país asiático. Se presume que hubo un sobreprecio al adquirirlas.
