El ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, negó la denuncia presentada por los diputados de Creemos sobre un presunto «narcovuelo» a África.
Según Montaño, la aeronave en cuestión no llevaba carga y estaba registrada para fines comerciales.
Felcn revisó exhaustivamente la aeronave
Montaño explicó que la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) revisó exhaustivamente la aeronave antes y después de su viaje, otorgando su visto bueno para que regresara al país. Además, señaló que se realizaron todos los controles necesarios antes de ingresar al territorio boliviano.
Denuncia sin pruebas adicionales
La denuncia presentada por los opositores indica que una aeronave procedente de África llegó al aeropuerto Viru Viru el 28 de febrero con ocho tripulantes y regresó el 1 de marzo con siete personas a bordo y presumiblemente una tonelada de droga. Sin embargo, no se presentaron pruebas adicionales.
No se puede restringir el aterrizaje
Montaño afirmó que no se puede restringir el aterrizaje de una aeronave para recargar agua o realizar diligencias. Agregó que Bolivia proporcionó servicios básicos como agua potable, descarga de aguas servidas y combustible.
Prohibir este tipo vuelos iría contra convenio internacional
El ministro también destacó que prohibir este tipo de vuelos iría en contra del convenio internacional suscrito con la Organización Internacional Civil (OACI), del cual Bolivia es signatario. Afirmó además que según informes recibidos, las personas involucradas venían al país por motivos comerciales.
Denuncia política
Esta denuncia surge después del escándalo relacionado con la salida ilegal de 478 kilos de cocaína desde el aeropuerto Viru Viru hasta el aeropuerto de Barajas, España, en febrero en un avión contratado por la empresa estatal Boliviana de Aviación (BoA).
Cumplimiento de controles y medidas de seguridad
Montaño ratificó que se cumplieron con todos los controles y medidas de seguridad necesarias y que la Felcn inspeccionó la aeronave. Consideró que la denuncia presentada por los opositores tenía motivaciones políticas.
