El fiscal departamental de La Paz, William Alave, informó este jueves 1 de junio que los procesos penales en caso de fallecimiento deben extinguirse según el artículo 27 del Código de Procedimiento Penal Boliviano. Sin embargo, aclaró que las investigaciones a los presuntos encubridores de los delitos de pederastia continúan en marcha.
Investigación sigue en marcha
“Si bien hay muchas personas que han fallecido, el artículo 27 del Código de Procedimiento Penal establece la extinción por fallecimiento; es decir, la extinción penal, pero el hecho sigue investigándose”, declaró Alave.
La autoridad explicó que hay gente que encubrió el hecho de pederastia en Bolivia y actualmente el proceso de investigación avanza contra esas personas porque todavía tienen responsabilidades.
Responsabilidades pendientes
“Hay gente que encubría este hecho, hay gente que ha protegido. Entendemos que nuestra fiscal que está a cargo, la doctora Verónica Miranda, ayer (miércoles) imputó a otras dos personas (…) que están relacionadas con el clero por el delito de encubrimiento; entonces estamos investigando”, subrayó Alave.
El sacerdote español Alfonso Pedrajas -conocido como padre Pica- es el principal investigado porque en su diario habría mencionado haber abusado sexualmente de menores durante su misión en Bolivia; sin embargo, murió en 2009 debido al cáncer a los 66 años.
Jesuitas suspendidos colaboran con la justicia
Se sabe también que Pedrajas se instaló en Bolivia en 1971 y realizó labores educativas en varios centros del país hasta meses antes de morir. Tras conocerse el hecho, la Compañía de Jesús en Bolivia suspendió a ocho jesuitas que -según las denuncias- presuntamente conocían de esos abusos, pero callaron para encubrir a Pedrajas. Ahora colaboran con la justicia para que se establezcan las responsabilidades.
Ampliación de investigaciones por encubrimiento
El pasado miércoles 31 de mayo, la Fiscalía de La Paz amplió las investigaciones por el presunto delito de encubrimiento contra el Provincial Bernardo Mercado y los exprovinciales y sacerdotes Osvaldo Chirveches e Ignacio Suñol.
