El informe elaborado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc) sobre la extensión de los cultivos de coca en Bolivia en el periodo 2021-2022 será presentado este martes, con cuatro meses de retraso a comparación de gestiones pasadas.
El viceministro de Defensa Social, Jaime Mamani, dio más detalles al respeto durante el fin de semana, según informó la Agencia de Noticias Fides.
“La Ley General de la Coca fija un límite de producción que está permitido, 22.000 hectáreas, también fija las zonas de producción; para esta gestión se planificó erradicar 10.000 hectáreas y ya hemos sobrepasado las 9.600 a la fecha”, declaró la autoridad.
Los informes anuales de la Unodc se publican desde 2003 y toman en cuenta la gestión de junio a junio de cada año. Por lo tanto, este año presentará los datos de junio de 2021 a junio de 2022. En los últimos seis años la producción de coca en el país tuvo un crecimiento constante.
Según los datos oficiales del ente internacional, en 2016 había una extensión de 20.200 hectáreas de coca en Bolivia; en el informe de 2017 se reportó que esa cifra creció a 23.100 hectáreas, lo que representó el primer incremento de la extensión de coca cultivada en el territorio boliviano.
En 2018, la extensión de coca alcanzó las 24.500 hectáreas; aunque la Ley General de la Coca fijó un límite de 22.000 hectáreas en todo el país. En el informe de 2019, la extensión de coca redujo a 23.100 hectáreas y fue el único decrecimiento en los últimos años.
En 2020 las plantaciones de coca volvieron a incrementarse y alcanzaron 25.500 hectáreas y un año después alcanzó el tope de 29.400 hectáreas. Debido a que el informe se realiza con los datos entre junio y junio de cada año, las últimas versiones se produjeron durante la gestión de Gobierno de Jeanine Áñez y la pandemia, que fueron factores influyentes en el crecimiento de las plantaciones.
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