Esta fue una de las medidas que la ofensiva ucraniana tomó para frenar el avance de las tropas rusas, además de un convoy de soldados y armamento que llegaba desde Bielorrusia con destino a Kiev.
Sumado a todas las medidas de defensa adoptadas por Ucrania, el Ejército destruyó el puente ubicado en la localidad de Romanov, considerado el paso clave para acceder a Kiev, la capital; según la armada ucraniana, la caída del puente y las falencias en suministros de combustible y alimentos demoraron la llegada de los rusos.
“Decidimos volarlo para dificultar el paso del enemigo, fue una voladura controlada y de esta manera cerramos la vía principal de acceso desde el Norte”, explicó uno de los oficiales del Ejército responsable de la protección del lugar, según informó ABC Internacional.
Sin embargo, la caída del puente no solo representó el retraso de la entrada de las tropas rusas a Kiev, los mismos ciudadanos ahora tienen problemas con aspectos como la obtención de suministros, las personas deben cruzar al otro extremo como equilibristas y siempre acompañados para conseguir comida en un supermercado ubicado al otro extremo.
En la capital de Ucrania las gasolineras están cerradas, no hay combustible ni suministros, no hay transporte público y los coches prácticamente desaparecieron, las patrullas son las únicas circulando y son las que trasladan a las personas que logran cruzar el puente caído.
/ LMPT
