Las autoridades de la ciudad brasileña de Petrópolis accionaron el reciente jueves las sirenas de alerta para evacuar varias zonas de riesgo ante nuevas lluvias intensas, dos días después que un temporal histórico provocara deslizamientos e inundaciones que hasta el momento dejaron 120 muertos.
Vecinos de varios barrios de dicha ciudad, situada a 68 kilómetros al Norte de Río de Janeiro en una región montañosa, fueron llamados al final de la tarde por las alarmas y mensajes de texto a resguardarse en casas de familiares o refugios públicos.
“Debido al volumen de lluvia que afecta a esa ciudad y que seguirá, con intensidad entre moderada y fuerte, en las próximas horas”, según informaron desde la Defensa Civil local, según reporte del portal Infobae.
Las nuevas precipitaciones ocurrieron 48 horas después que las peores lluvias en 90 años en esta antigua ciudad imperial dejaran un reguero de destrucción y escenas escalofriantes de calles y laderas convertidas en ríos arrastrando automóviles, buses con pasajeros y todo a su paso.
Mientras el cementerio municipal se organizaba para realizar sucesivos entierros de víctimas, rescatistas y voluntarios continuaban buscando desesperadamente a personas desaparecidas entre el lodo y los escombros, cada vez con menos esperanzas de hallarlos con vida.
Según las autoridades, al menos 500 bomberos, con la ayuda de cientos de voluntarios, perros, máquinas excavadoras, camiones, botes y una decena de aeronaves se emplean en las tareas de rescate.
Desaparecidos
Actualmente existen 120 muertos confirmados y 24 rescatados, mientras que las cifras de desaparecidos son confusas debido a los pocos cuerpos identificados.
La Policía Civil registraba hasta el jueves 116 desaparecidos, según los medios locales, y el Ministerio Público, informaron que en su servicio de localización de personas siguen registrados 35, aunque ambas cifras fueron revisadas a medida que ubicaban sobrevivientes o se identificaban cuerpos.
Hasta ahora, casi 850 personas desplazadas fueron trasladadas a refugios improvisados, la gran mayoría en escuelas públicas.
Tras su viaje a Rusia y Hungría, el Presidente Jair Bolsonaro visitará este viernes la zona afectada de esta ciudad turística.
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