El Gobierno Autónomo Departamental de Oruro (Gad-Oru) al año destina aproximadamente un millón de bolivianos para el funcionamiento del Teleférico Turístico “Virgen del Socavón”, pero de las ganancias no recibe ni un peso ya que está administrado por la empresa Mi Teleférico con asentamiento en La Paz.
“Hay una serie de problemas y esto no está bien, la empresa Mi Teleférico no responde al departamento, tiene su asentamiento en la ciudad de La Paz, pero la Gobernación de Oruro invierte aproximadamente más de un millón de bolivianos en lo que corresponde a su funcionamiento, pero no recibe ni un boliviano”, manifestó el gobernador Johnny Vedia.
Mesas
En julio de 2017 se firmó un convenio entre Mi Teleférico, la Gobernación y el Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO), debido a algunas observaciones a ese documento, se harán mesas de trabajo, porque lo que se busca desde la Gobernación es reajustarlo sin vulnerar la norma, pero cuidando los intereses del departamento.
“Supuestamente dentro del convenio firmado por anteriores autoridades cuando se cumpla la inversión que ha realizado la empresa van a pasar los activos pero no dice si pasa a la Gobernación o al Municipio y eso sería dentro de 50 años, entonces tendríamos que erogar más de 50 millones de bolivianos en estos 50 años”, añadió.
Oposición
En su momento, los exasambleístas departamentales de oposición, William Torrez y Saúl Sánchez, hicieron observaciones al convenio, señalando que el mismo no beneficiaba al departamento, incluso se sugirió su modificación, pero dichas aseveraciones fueron desestimadas por el exgobernador Víctor Hugo Vásquez.
“Vamos a solicitar que se haga modificaciones al convenio (suscrito el 5 de julio del 2017, entre Mi Teleférico, gobernación y alcaldía), pues el mismo no beneficia al departamento, ya que son todos gastos y no ingresos; que todo lo que ingresa los fines de semana se van a la empresa estatal (Mi Teleférico)”, manifestaba Torrez en abril de 2018.
Datos
El teleférico de Oruro fue inaugurado el 7 de febrero de 2018 y tuvo un costo de 128 millones de bolivianos, fue financiado por el gobierno nacional en un 50 por ciento, la Gobernación aportó el 30% y la Municipalidad el 20%.
