La extradición del exjefe antidrogas boliviano Maximiliano Dávila a Estados Unidos, que se llevó a cabo el jueves desde el aeropuerto internacional de El Alto, ha generado una serie de denuncias por parte de los seguidores del expresidente Evo Morales. Estos acusan al Gobierno de Luis Arce de haber orquestado un plan para vincular a Morales con el narcotráfico, con el objetivo de inhabilitar su candidatura presidencial para las elecciones de 2025.
Denuncias de los seguidores de Morales
El dirigente «evista» Rodolfo Machaca ha señalado que el Gobierno de Luis Arce ha diseñado un plan en colaboración con la Administración de Control de Drogas (DEA) y la Agencia Central de Inteligencia (CIA) para extraditar a Morales. Machaca afirmó: «Aquí hay un plan directamente de involucrar al hermano Evo Morales y a los pueblos indígenas con el narcotráfico». Además, mencionó que el Gobierno de Estados Unidos presionará a Dávila para que «mienta» y presente a Morales como responsable de supuestos delitos relacionados con el narcotráfico.
La semana pasada, Morales declaró a EFE que el Gobierno de Luis Arce está presuntamente preparando un plan para detenerlo y llevarlo a Estados Unidos o Argentina, como una manera de apartarlo de la candidatura presidencial en los comicios del próximo año. El exmandatario insinuó que este supuesto plan está vinculado a la situación de Dávila en Estados Unidos y a un proceso por trata de personas en Argentina, en el que asegura que «no hay nada» que lo incrimine.
Extradición de Dávila
El jueves, Dávila, quien fue el último jefe antidrogas durante el Gobierno de Morales, fue extraditado a Estados Unidos en un avión que despegó del aeropuerto internacional de El Alto. Esto se realizó para que Dávila responda a acusaciones relacionadas con el narcotráfico. Dávila fue detenido en enero de 2022 y ha estado encarcelado preventivamente en La Paz desde entonces, enfrentando cargos por el presunto delito de legitimación de ganancias ilícitas, que puede conllevar una pena de cinco a diez años de prisión.
Acusaciones contra Dávila
Las autoridades bolivianas habían acusado anteriormente al exjefe policial de «proteger» a una red de narcotraficantes que fueron arrestados en Perú y Colombia, respaldados por una investigación de la DEA. Morales y sus seguidores han calificado la extradición de Dávila a Estados Unidos como un sometimiento del Gobierno a ese país, además de señalarlo como una muestra del fracaso de la Justicia boliviana en este caso.
División en el oficialismo
Desde finales de 2021, el exmandatario Morales se ha distanciado del Presidente Luis Arce debido a diferencias en la gestión del partido oficialista y del Ejecutivo. Esta situación ha generado una fuerte división en el oficialismo, lo que ha agudizado la crisis económica que enfrenta Bolivia, caracterizada por la falta de dólares y la escasez de combustible. En una conferencia de prensa desde la sede del Movimiento Al Socialismo (MAS), Machaca reiteró que «hay un plan armado desde el Gobierno para involucrar a Evo Morales».
Demandas sobre el narcotráfico
Este sector pide a Dávila que revele quiénes son los verdaderos involucrados en el narcotráfico y ha señalado al exministro de Gobierno Arturo Murillo y al actual ministro Eduardo Del Castillo. Machaca afirmó: «Maximiliano Dávila tiene muchos nombres de peces gordos operando en el país». Asimismo, indicó que esta decisión es una muestra de que el Gobierno no ha podido resolver los casos relacionados con el narcotráfico.