Rusia llevó a cabo un ataque masivo contra infraestructuras energéticas en varias regiones de Ucrania. Este ataque incluyó el lanzamiento de más de 90 misiles y cerca de 200 drones, lo que resultó en daños significativos al sistema eléctrico del país.
El presidente ucraniano Volodímir Zelenski reaccionó exigiendo medidas internacionales más estrictas para limitar la producción de misiles rusos. Por su parte, Moscú justificó su ofensiva como una represalia por el uso de misiles ATACMS por parte de Ucrania.
Este ataque se produce en un contexto de creciente tensión y representa el duodécimo asalto ruso al sector energético ucraniano desde marzo.
Importación de componentes rusos
Zelenski afirmó que el presidente ruso Vladímir Putin continúa importando los componentes electrónicos necesarios, a pesar de las sanciones impuestas por los aliados de Ucrania para detener estas importaciones. Kiev ha encontrado regularmente chips y otras piezas fabricadas en Occidente en los misiles y drones rusos que caen en su territorio.
Además, Zelenski mencionó el dinero que Rusia sigue recibiendo por la venta de petróleo y pidió que se refuercen las sanciones para que estas tengan “un impacto significativo en la producción de misiles” por parte de Rusia.
Demandas de una respuesta contundente
“Necesitamos una reacción contundente del mundo: a un ataque masivo debe responderse con una reacción masiva”, indicó Zelenski. El presidente ucraniano también afirmó que el bombardeo del viernes es una prueba de que Putin no quiere la paz. “Este es el plan ‘de paz’ de Putin, destruirlo todo. Así es como quiere ‘negociar’, aterrorizando a millones de personas”, puntualizó.
Justificación del ataque por Rusia
Desde Moscú, el Ministerio de Defensa ruso aseguró que el ataque es una respuesta al lanzamiento esta semana por parte de Ucrania de misiles estadounidenses ATACMS contra un aeródromo del sur de Rusia. Según el parte militar ruso, todos los objetivos fueron alcanzados.
Entre estos objetivos, había “instalaciones vitales” de la red energética que alimentan a la industria militar enemiga, las cuales habrían sido golpeadas con drones suicidas.
Impacto en la infraestructura ucraniana
Como ocurrió en otros bombardeos recientes, las infraestructuras eléctricas del Oeste de Ucrania fueron alcanzadas en este ataque. Esto ha obligado a Ucrania a extender los cortes de luz programados debido a la escasez de suministro creada por ataques anteriores.
Las autoridades ucranianas informaron sobre impactos en infraestructuras críticas en las regiones de Leópolis, Ivano-Frankivsk y Ternópil. Solo en Leópolis, se reportaron daños en seis infraestructuras energéticas distintas.
Balance del ataque
Según el balance del ataque ofrecido por la Fuerza Aérea ucraniana, Rusia empleó un total de 94 misiles para asestar este nuevo golpe a la red energética ucraniana. Las defensas ucranianas lograron interceptar 81 misiles, entre ellos cuatro misiles hipersónicos Kinzhal.
Todos estos misiles iban acompañados de 193 drones kamikaze Shahed y otros modelos, aunque 185 de ellos no alcanzaron sus objetivos.
Daños y declaraciones de DTEK
A pesar del alto porcentaje de interceptaciones, varias centrales eléctricas han resultado dañadas por los misiles o drones rusos. Según DTEK, los impactos provocaron “daños significativos en equipamiento”, pero no causaron víctimas.
“Cuando los ucranianos se despertaban en el día más frío del invierno, el enemigo intenta quebrar nuestro espíritu con otro ataque terrorista, pero no lo conseguirán”, declaró Maxim Timchenko, director ejecutivo de DTEK.
Escasez energética en Ucrania
En este contexto crítico, se destaca cómo las autoridades ucranianas han tenido que implementar cortes prolongados debido a la escasez energética provocada por ataques previos y actuales. La situación resalta la vulnerabilidad del sistema energético nacional frente a las ofensivas continuas.
Esto subraya la necesidad urgente, tanto interna como internacional, de abordar esta crisis humanitaria y energética emergente.
