El jueves 21 de noviembre, se vivieron intensas peleas en la Cámara de Diputados. Estos conflictos fueron protagonizados por parlamentarios del Movimiento Al Socialismo (MAS) que intentaron tomar la testera antes de que comenzara la sesión. Ante esta situación, el diputado de Comunidad Ciudadana (CC), Alberto Astorga, ha solicitado al presidente de la Cámara, Omar Yujra, que se instale la Comisión de Ética. Esto con el fin de que los asambleístas responsables de las peleas sean suspendidos de sus cargos por un período de 6 meses.
Astorga ha expresado que las constantes peleas en la Cámara de Diputados están perjudicando los proyectos que están en la agenda y que requieren ser debatidos para su aprobación. Entre estos temas se encuentra el Presupuesto General del Estado 2025, así como otros asuntos que están siendo aprobados en Comisión Mixta.
Demandas de justicia
En medio de la controversia, Astorga ha manifestado que los 12 diputados que causaron el bochorno en la Cámara deben ser juzgados. Según él, estos parlamentarios impiden que las sesiones se realicen con normalidad. Además, ha señalado que los 12 legisladores involucrados pertenecen al MAS, tanto a la facción «evista» como a la «arcista».
Reacciones del MAS
Por su parte, el jefe de bancada del MAS, José Luis Flores, ha indicado que la resolución del amparo constitucional que se presentó para garantizar el desarrollo de la sesión fue incumplida por los parlamentarios «evistas». Estos últimos tomaron la testera de manera violenta.
Flores ha hecho un llamado al respeto entre los parlamentarios y ha sugerido que todos los problemas internos sean resueltos a través de una mesa de diálogo. Esto con el objetivo de evitar que se repitan situaciones similares a las ocurridas el jueves pasado. También ha exigido que se active la Comisión de Ética.
Contexto legislativo tenso
La situación actual en el Legislativo es tensa, y las disputas internas están afectando no solo el funcionamiento normal de las sesiones, sino también el avance de iniciativas clave para el país. Las peleas han puesto de manifiesto la urgente necesidad de establecer mecanismos efectivos para resolver conflictos y garantizar un ambiente propicio para el debate democrático.