El presidente de la Confederación Nacional de Gremiales y Comerciantes de Bolivia (Congabol), Óscar Arnez, ha resaltado la relevancia del Decreto Supremo 5271. Esta normativa permite la libre importación y comercialización de combustibles en Bolivia, lo que se considera una medida fundamental para abordar la crisis económica que enfrenta el país.
En una reciente entrevista, Arnez enfatizó que la liberalización de los combustibles es una estrategia clave para reactivar la producción y mejorar la competitividad de las empresas bolivianas.
Preocupaciones sobre las divisas
Arnez también expresó su inquietud respecto al manejo de las divisas en este nuevo contexto. Subrayó la necesidad de aclarar cómo se gestionarán los cambios en este ámbito. «El problema está con las divisas. Esta situación debe ser aclarada para conocer qué tipo de ajustes o cambios se implementarán», comentó.
La decisión de permitir la libre importación y comercialización de combustibles ha generado un debate considerable en la sociedad. Sin embargo, Arnez sostiene que esta medida es esencial para superar la crisis económica que afecta al país, especialmente debido al alto costo de los combustibles y su impacto en los costos de producción.
Visión de los productores
El presidente de CONGABOL indicó que no considera que existan intenciones políticas detrás de este decreto. En su opinión, el país se encuentra en una situación muy crítica y lo más importante es priorizar la producción.
Desde la perspectiva de los productores, creen que esta liberalización favorece los intereses de todos los involucrados. En el contexto de los combustibles, no hay espacio para condicionamientos. La liberalización de la importación y distribución de combustibles es vista como una opción estratégica para mitigar los problemas económicos que enfrenta Bolivia.