Los bloqueos en Bolivia, llevados a cabo por seguidores del exmandatario Evo Morales, continuarán según el diputado Freddy López. Este legislador denuncia que el Gobierno ha «humillado a la clase indígena originaria» y ha vulnerado los derechos humanos de estas comunidades.
López también ha acusado al ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, de mentir sobre la situación actual. Afirmó que la intervención policial en los bloqueos estuvo respaldada por la embajada americana y la Administración de Control de Drogas (DEA).
Derechos humanos vulnerados
El diputado ha indicado que las acciones en contra de los bloqueadores son una violación a los derechos humanos. Según López, estas medidas son una respuesta desproporcionada a las movilizaciones que buscan visibilizar las demandas de la población indígena.
Injerencia extranjera
López ha manifestado que durante la intervención de la Policía en los bloqueos, «la embajada americana y la Administración de Control de Drogas (DEA) fueron quienes estaban operando la situación». Esta afirmación sugiere una posible injerencia extranjera en los asuntos internos del país.
Tensiones históricas
La situación actual refleja un contexto histórico de tensiones entre el Gobierno y los sectores indígenas. Estas comunidades han expresado su descontento con políticas que consideran discriminatorias y que no abordan sus necesidades.
Impacto económico de los bloqueos
Los bloqueos han generado un impacto económico significativo en diversas áreas, afectando el transporte y el comercio en varias regiones del país. Las protestas se han intensificado como respuesta a lo que consideran injusticias sistemáticas.