La noche del viernes, Nelson Cox, quien es abogado del expresidente Evo Morales, sufrió un ataque tras la realización de un cabildo en Cochabamba. Este incidente ha generado una gran preocupación en el ámbito político del país.
El expresidente Evo Morales denunció que «grupos paramilitares» asaltaron las instalaciones de la Federación de Trabajadores Campesinos del Trópico de Cochabamba. Esta situación ha sido calificada por Morales como un acto de violencia que busca desestabilizar a la organización campesina.
Reacciones del expresidente
Morales afirmó: «Que el mundo sepa que Luis Arce ha reactivado el fascismo en Bolivia junto a su aliado Manfred Reyes Villa». En sus declaraciones, el expresidente comparó la situación actual con los eventos ocurridos durante el golpe de 2019, sugiriendo que se están repitiendo patrones de violencia.
El expresidente también mencionó que «se están utilizando grupos paramilitares para incendiar las instalaciones de la Federación de Trabajadores Campesinos del Trópico de Cochabamba». Esta afirmación resalta la gravedad de la situación y la preocupación por la seguridad de los líderes campesinos.
Grupos de choque y recomendaciones
Morales continuó su denuncia señalando que «estos mismos grupos de choque, que el GIEI recomendó desarticular, son utilizados por este gobierno para atacar al pueblo». Esta declaración pone de relieve la crítica del expresidente hacia la administración actual y su uso de la fuerza.
Difusión de la información
La declaración de Evo Morales fue compartida a través de sus redes sociales y también fue reafirmada en una entrevista que brindó en Radio Kawsachun Coca la mañana del sábado. Este tipo de comunicación busca informar a sus seguidores y a la población sobre lo que considera una situación alarmante en el país.