Una jornada violenta se desató este viernes en el desbloqueo de la carretera hacia el occidente, específicamente en el municipio de Vinto. Allí, fuerzas policiales y militares intentaron despejar un punto de protesta que llevaba 12 días. Los enfrentamientos entre los efectivos del orden y los manifestantes evistas resultaron en varios heridos y detenidos, mientras los bloqueadores respondieron con explosivos y objetos contundentes.
Inicio del operativo policial
Todo comenzó al amanecer, cuando un contingente policial y maquinaria pesada de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) llegaron al punto de bloqueo en el municipio de Vinto, a la altura del Puente Khora I. Después de dialogar con los bloqueadores, se habilitó una vía para el paso de vehículos. Entonces, la maquinaria pesada comenzó a retirar escombros y piedras que obstaculizaban la carretera.
A media mañana, los efectivos avanzaron hacia la localidad de Suticollo y luego Parotani. Los manifestantes respondieron con detonaciones de dinamita, incluso arrojándolas hacia los uniformados. En respuesta, la Policía usó gases lacrimógenos, que fueron arrojados hacia los cerros, desde donde los bloqueadores estaban lanzando piedras y objetos contundentes.
Arrestos y enfrentamientos
Los policías empezaron a levantar piedras, escombros y promontorios de tierra que se usaban para bloquear la carretera. A la vez, se informó del arresto de un supuesto dirigente, que tenía en su poder «objetos que llamaban la atención» como sellos, documentos y cuadernos. Luego, se reportó el arresto de otras dos personas sospechosas.
Paralelamente, productores y cívicos del Valle Bajo de Cochabamba llevaron a cabo el desbloqueo de la ruta a la altura del municipio de Vinto, en el Puente Khora I. Utilizaron una gran cantidad de petardos, mientras que personal policial se mantuvo en la zona para evitar el restablecimiento del bloqueo.
Riesgo para los uniformados
El contingente fue emboscado por los manifestantes, que lanzaron cartuchos de dinamita y piedras con ondas, poniendo en grave riesgo la seguridad de los uniformados y de las familias que residen en la zona. También se encontraron bombas molotov en el lugar.
Después del mediodía, los conductores de cisternas de combustible, que estaban varadas hace más de siete días en el lugar, huyeron ante el peligro que significaba el uso de dinamitas cerca de material inflamable. El ruido de los artefactos explosivos resonaba en el sector.
Reacciones de los bloqueadores
Los bloqueadores se burlaban de los uniformados; además, quemaron llantas en plena carretera para contrarrestar el efecto de los gases lacrimógenos. Las fuerzas del orden se desplazaron a los cerros aledaños para intentar detener a los bloqueadores, quienes continuaban atacando desde las alturas. Pasadas las 14:00 horas, el contingente policial llegó hasta el punto crítico; levantaron los escombros y retiraron las carpas instaladas con maquinaria pesada. Sin embargo, los movilizados lograron hacer retroceder a los efectivos lanzando piedras y dinamitas.
Heridos y evacuaciones
Los «evistas» volvieron a retomar la carretera y cerraron nuevamente las vías con promontorios de piedras. La Policía tuvo que abandonar el lugar. Un efectivo policial resultó herido en una pierna debido a un cachorro de dinamita y fue evacuado por el mismo contingente. El reporte indica que siete policías resultaron heridos, dos de ellos de gravedad.
Mientras los policías intentaban replegarse, las dinamitas continuaban llegando y una de estas impactó contra un efectivo, destrozándole la pierna. El herido empezó a gritar de dolor mientras sus compañeros se movilizaban para auxiliarlo.
Movimiento militar en la zona
Cerca de las 18:00 horas se observó movimiento militar en la avenida que conecta con la carretera al occidente desde Cochabamba. El contingente llegó hasta Vinto, donde en ese momento resguardaba el área.
Tras los enfrentamientos, Evo Morales afirmó a través de su cuenta X que «el gobierno instruyó ilegalmente a cerca de 200 policías y militares emboscar e intervenir el punto de protesta». Además, manifestó: «Advertimos a la comunidad nacional e internacional que cualquier hecho donde exista derramamiento de sangre será responsabilidad del gobierno».