El gobierno de Bolivia ha decidido intervenir todos los puntos de bloqueo que se han establecido en el país. La operación comenzó en Caracollo, ubicado en la ruta que conecta La Paz y Oruro. Este sábado, efectivos de la policía intervinieron la vía con el objetivo de garantizar la libre transitabilidad, después de que se registraran 6 días de obstrucción.
El diputado Jhonny Pardo ha denunciado que esta intervención forma parte de un plan del gabinete político para desbloquear las rutas y capturar al expresidente Evo Morales. Pardo advierte sobre el riesgo de confrontaciones y posibles víctimas que podrían surgir de esta acción.
El legislador afirmó que el gobierno tiene la intención de despejar las rutas antes del lunes. “Lo preocupante de esta planificación es que el gobierno está jugando sus últimas cartas, insinuando que los bloqueos serán intervenidos sin importar si hay muertos o heridos. Es un plan que parece declarar la guerra a los hermanos bloqueadores”, declaró Pardo a RKC.
Responsabilidad del gobierno
Pardo advirtió que, a partir de este momento, cualquier incidente que ocurra será responsabilidad de los ministros de Estado. Según él, en lugar de promover el diálogo, estos funcionarios estarían buscando la confrontación, lo que podría resultar en víctimas.
Además, el diputado señaló que la intervención incluiría la participación de militares que estarían vestidos de civil, así como otros uniformados que actuarían como policías para desmantelar los bloqueos existentes.
Exigencias de los manifestantes
No obstante, Pardo considera que el diálogo ya no sería una solución viable. Los manifestantes están exigiendo la renuncia del presidente Luis Arce para adelantar las elecciones nacionales, lo que complica aún más la situación en el país.
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