El bloqueo en la provincia Omasuyos y la marcha de Evo Morales han generado pérdidas acumuladas de 238 millones de dólares en el departamento de La Paz. Estas situaciones han afectado de manera significativa a la industria manufacturera y al sector agropecuario. Según el viceministro de Políticas de Industrialización, Luis Siles, las consecuencias de estas medidas también se han extendido a los departamentos de Santa Cruz y Cochabamba, donde se han registrado pérdidas adicionales de 37,2 millones y 17,7 millones de dólares, respectivamente.
Impacto en la industria manufacturera
A raíz de los bloqueos, la industria manufacturera en el eje central del país enfrenta pérdidas que oscilan entre 80.000.000 y 100.000.000 de dólares cada día. Un ejemplo claro de esta situación es la Planta de Procesamiento de Lácteos, ubicada en el municipio de Achacachi, que es parte de la estatal Empresa Boliviana de Alimentos y Derivados (EBA). Esta planta está sufriendo una pérdida de 250.000 bolivianos por día.
Afectaciones al sector lechero
El sector lechero también se encuentra en una situación complicada. Se estima que aproximadamente 60.000 bolivianos por día no pueden ser entregados a la planta procesadora, lo que causa un perjuicio considerable al sector productivo que depende de esta actividad. En relación a la carne, el viceministro Siles lamentó que hay una afectación de 56.229 toneladas de carne de res, 133.000 toneladas de carne de pollo y 15.000 toneladas de carne de cerdo.
Consecuencias de las marchas
Recientemente, La Paz y otros departamentos han sido afectados por los bloqueos y la marcha que se inició en Oruro y llegó hasta la Sede de Gobierno. Esta movilización fue protagonizada por seguidores de Evo Morales, quienes buscan forzar una nueva candidatura del dirigente cocalero. Estas acciones han resultado en la pérdida de 6,3 millones de bolivianos, lo que impacta negativamente a 20.000 familias de productores lecheros y pesqueros.
La pérdida constante de La Paz
El viceministro Siles expresó su preocupación al afirmar: «Cada vez que hay bloqueos y marchas sin sentido, La Paz pierde». Esta situación pone de manifiesto la necesidad de encontrar soluciones que eviten que la economía de la región continúe sufriendo por estas medidas de protesta.
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