Una tensa jornada se vivió el jueves en la Avenida 6 de Agosto entre Ayacucho y Caro, donde, de forma arbitraria y desconociendo la vigencia de la Ordenanza Municipal 063, en horas de la madrugada los comerciantes de la temporada del 21 de Septiembre armaron sus puestos de venta, ante la indignación de los vecinos de la zona que una vez más se veían perjudicados.
Se vivieron momentos muy complicados, donde vecinos y comerciantes se enfrascaron en una ardua discusión, unos exigiendo respetar la normativa vigente y los otros, aduciendo que no se les puede impedir el derecho a trabajar.
El representante de las Ferias de Temporada, Oscar Calisaya, insistía en que la Ordenanza Municipal 063, la cual instruye desde 2013 su traslado a la calle Montesinos, fue aprobada con varias irregularidades y que, por lo mismo, no tiene sentido su aplicación.
Los vecinos, a través de su representante, Adolfo Gutiérrez, lamentaron que una vez más las autoridades en el municipio no tengan la capacidad para hacer respetar una ordenanza municipal, que ya estaba vigente desde hace 11 años atrás.
Gutiérrez denunció que algunos concejales, como José Flores, ya están trabajando en campaña política y por eso mismo pretenden ganar adeptos entre los comerciantes, presentando un proyecto para desconocer una ordenanza y advirtió que no lo van a permitir.
DISPOSICIÓN Y POLÉMICA
Los comerciantes, que sorprendieron con su asentamiento en la madrugada, poco pudieron hacer en todo el día ya que, por instrucciones del ejecutivo municipal, la Unidad de Defensa al Consumidor dispuso a la Guardia Municipal para que no se permita ninguna actividad económica y así se hizo respetar ante los reclamos de los comerciantes.
“Nos basamos en la normativa y vamos a hacerla cumplir”, declaró el jefe de unidad, capitán Ronald Canqui.
Entre tanto, surgió la polémica entre los mismos concejales. El vicepresidente del Concejo Municipal, Samuel Mendizábal, sugirió permitir por este año la presencia de estos comerciantes mientras se busca la alternativa de construir un campo ferial que podría ubicarse en predios de la ex Aduana, o lo que ha sido la PM, terreno que por ahora no tiene utilidad.
En la otra visión, la concejal Edmeé Castillo declaró que no se puede asumir determinaciones de manera ligera y sin que medie razonamiento alguno; ella consideró que debe hacerse un cuidadoso análisis para modificar la normativa vigente.
Ratificó que, en ese sentido, presentará su informe por minoría, tomando además los 15 días que le otorga la ley, para cumplir con ese cometido.
Por último apareció también la exalcaldesa de Oruro, Rossío Pimentel, en cuya gestión se aprobó la ordenanza que instruye el traslado de estas ferias a la calle Montesinos, iniciando desde la Avenida Brasil hacia el lado Este.
Lamentó que la situación llegue a este extremo y sobre todo, por algo fundamental que ha faltado a las gestiones anteriores en el municipio y que en la gestión actual no es excepción: Principio de autoridad.
Al caer la noche, varios de los feriantes procedieron a desarmar sus puestos y abandonar la avenida; se desconoce si irán a otro punto de la ciudad, pero lo cierto es que, hasta el cierre de esta edición, la avenida 6 de Agosto comenzaba a ser dejada por los comerciantes.
