Un estudio realizado por el Profeni (Profesionales Expertos en Nutrición Infantil) ha revelado que el 77% de los niños enfrenta la neofobia alimentaria, un fenómeno que limita su ingesta de alimentos saludables y afecta su desarrollo. Esta condición puede tener consecuencias negativas en la creación de defensas del sistema inmune, el desarrollo cognitivo y el tamaño corporal.
El miedo a probar comidas nuevas y sus consecuencias
La neofobia alimentaria es un mecanismo adaptativo que evita que los niños consuman alimentos nuevos potencialmente peligrosos. Sin embargo, los seres humanos resuelven este temor observando y copiando las dietas de otros. Es importante destacar que la falta de nutrientes en las primeras etapas de la vida puede tener efectos negativos en la salud de los niños.
Es común que muchas familias recurran a técnicas inefectivas para lidiar con la neofobia alimentaria. Obligar a un niño a comer todo lo que está en el plato y castigarlo si no lo hace puede empeorar la situación. Los especialistas en nutrición infantil del Profeni brindan estrategias para manejar este rechazo y mejorar la relación que los niños tienen con la comida.
El aprendizaje de los sabores desde temprana edad
El proceso de aprendizaje de los sabores comienza incluso antes de que los niños prueben sus primeras comidas. Al principio, los niños suelen tener una mayor inclinación hacia lo dulce, y la exposición repetida a nuevos alimentos a lo largo del tiempo es clave para su incorporación. Las primeras experiencias con la comida, incluyendo la lactancia materna, impactan en las futuras preferencias de sabor.
La importancia de una dieta equilibrada
Actualmente, los niños con neofobia alimentaria tienden a tener una dieta con alto contenido de grasas y consumen pocas verduras y frutas, llegando a consumir tan solo el 20% de las cantidades recomendadas. Estos alimentos son ricos en fibra, esencial para una buena digestión y absorción de nutrientes. Además, no incorporan las porciones de lácteos necesarias para mantener niveles saludables de calcio y vitamina D.
El papel de los adultos en los hábitos alimentarios de los niños
Es crucial entender que las preferencias alimentarias se desarrollan desde una edad muy temprana. Los hábitos alimentarios de las personas que rodean al bebé son importantes, ya que si los adultos tienen un consumo limitado de alimentos, esto puede influir en la aceptación de nuevas comidas por parte del niño. Por lo tanto, es fundamental crear un entorno social positivo a la hora de comer.
Estrategias para mejorar la aceptación de nuevos alimentos
Para facilitar una mayor aceptación de nuevos alimentos, se pueden combinar con las comidas preferidas del niño. Además, la exposición repetida a pequeñas cantidades de un alimento, cocinado o preparado de diferentes formas, puede aumentar la probabilidad de aceptación. Los expertos recomiendan proporcionar tres alimentos nuevos tres veces cada uno, alternándolos durante varios días para lograr mayor efectividad.
Incluir a los niños en la preparación de los alimentos puede hacer una diferencia en su disposición a probar nuevas opciones. Es importante garantizar que sea un lugar seguro y fomentar la variedad de alimentos al comer frente a los niños, para que observen que son seguros.
