El ministro de Defensa de Polonia, Władysław Kosiniak-Kamysz, anunció hoy la firma de un contrato por más de 1.100 millones de euros para la fabricación de 48 lanzamisiles Patriot M903. El acuerdo se llevó a cabo entre la empresa estadounidense Raytheon y la polaca Huta Stalowa Wola en una rueda de prensa en las instalaciones militares de Sochaczew, donde se encuentra la 3ª Brigada de Misiles de Defensa Aérea del Ejército polaco.
Fortaleciendo el programa Wisla
Este contrato también incluye la fabricación de componentes y suministros para los dos sistemas Patriot que ya están en funcionamiento en Polonia, entre los años 2027 y 2029. Estos nuevos materiales serán utilizados para implementar la segunda fase del programa Wisla, el escudo de defensa antiaérea polaco que contará con ocho baterías Patriot, cada una con ocho lanzadores.
La tecnología más avanzada
La variante adquirida por Polonia será capaz de utilizar los misiles PAC-3 MSE y estará equipada con el sistema de gestión de defensa antiaérea IBCS, considerado el más avanzado y efectivo de su clase. Polonia se convierte así en el primer país, aparte de Estados Unidos, en tener acceso a estas armas.
Un hito en la relación entre Polonia y Estados Unidos
El embajador estadounidense en Polonia, Mark Brzezinski, destacó la importancia de fabricar estos sistemas en suelo polaco, lo cual demuestra el nivel de confianza alcanzado entre ambos países. Estados Unidos no comparte los secretos de sus armas más avanzadas con cualquiera, por lo que esta colaboración es un hito significativo en la relación bilateral.
Transferencia de tecnología
Si bien otras empresas polacas ya producen componentes del sistema Patriot, esta es la primera vez que Washington autoriza la transferencia de tecnología para fabricar los lanzamisiles en su totalidad. Esto representa un avance importante para la industria de defensa polaca.
El Patriot, un sistema de defensa efectivo
El sistema de defensa antiaérea Patriot es capaz de interceptar misiles balísticos tácticos de corto alcance, misiles de crucero, aviones de combate y drones. Su efectividad quedó demostrada en junio de 2023, cuando en su primer mes de uso por parte del Ejército ucraniano se interceptaron más de 80 proyectiles rusos, incluyendo siete misiles supersónicos Kinzhal.
Fuente: EFE
