El miércoles 19 de junio, las autoridades bolivianas expulsaron a Luiz Fernando Soares de Souza, un ciudadano brasileño vinculado al Primer Comando de la Capital (PCC). El sujeto, quien era buscado por más de 20 delitos, fue entregado a las fuerzas del orden de Brasil.
Luiz Fernando Soares de Souza, también conocido como David Araujo Silva, fue capturado recientemente por el Departamento de Inteligencia del Centro Especial de Investigación Policial (CEIP) de Santa Cruz. Su arresto tuvo lugar en la zona de la Universidad Cristiana de Bolivia (Ucebol), según informó la Agencia Boliviana de Información (ABI).
Delitos imputados
El brasileño de 38 años es sospechoso de pertenecer a una organización criminal, así como de estar involucrado en actividades de narcotráfico, tenencia ilegal de armas, homicidio y asesinato. Las autoridades bolivianas consideran a Soares como un criminal de alta peligrosidad debido a todas las actividades ilícitas que realizaba en el país.
Objetivos en Bolivia
Se presume que Luiz Fernando Soares de Souza buscaba establecerse en la capital cruceña y activar grupos irregulares para el tráfico de sustancias controladas, lavado de activos y legitimación de ganancias ilícitas. Su captura representa un golpe importante para las redes criminales que operan en Bolivia.
Compromiso de Bolivia contra el crimen
El gobierno boliviano ha dejado claro que no permitirá que personas que busquen evadir la justicia o utilizar el territorio nacional como refugio para actividades delictivas permanezcan en el país. En este sentido, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, afirmó que aquellos que intenten hacerlo serán inmediatamente expulsados y entregados a las autoridades correspondientes.
La expulsión de Luiz Fernando Soares de Souza demuestra el compromiso de Bolivia en la lucha contra el crimen organizado y su disposición para colaborar con otros países en la persecución de delincuentes internacionales.