A una semana de la realización del congreso de los «arcistas», una facción del Movimiento Al Socialismo (MAS), se ha asegurado que el evento se llevará a cabo y contará con una asistencia masiva, a pesar de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) aún no ha confirmado su supervisión.
La senadora Virginia Velasco ha enfatizado que, según el estatuto del partido, las organizaciones sociales son los verdaderos dueños del MAS. Por lo tanto, tienen el derecho de celebrar el congreso en El Alto. Velasco ha asegurado que la concentración será multitudinaria y marcará la refundación de la organización política.
Disputas internas sobre la convocatoria al congreso
Por otro lado, la senadora radical Simona Quispe ha destacado que solo la dirección nacional, encabezada por Evo Morales, tiene la autoridad para convocar al congreso. En su opinión, los «arcistas» están dando un golpe al instrumento político al convocar a un congreso paralelo sin tener las atribuciones legales.
El senador Félix Ajpi ha lamentado que los intereses de ambas facciones estén perjudicando al MAS y a su militancia. Ha asegurado que esta pelea no tendrá resultados positivos y ha llamado nuevamente a la unidad entre todos.
Rechazo a la refundación del partido y a la toma de decisiones sin la presencia del Órgano Electoral
Ajpi también ha rechazado la idea de refundar el partido y ha criticado la propuesta de tomar decisiones, como la estructuración de una nueva directiva, sin la presencia del Órgano Electoral. Según él, esto iría en contra de la Ley de Organizaciones Políticas.