El jefe de la Dirección de Inteligencia, Aharon Haliva, presentó su renuncia este lunes 22 de abril debido a la inacción militar que no pudo evitar el ataque múltiple de Hamás el pasado 7 de octubre, en el cual fallecieron 1.200 personas en territorio israelí.
En una decisión conjunta con el jefe del Estado Mayor y con la aprobación del ministro de Defensa, se acordó que el general Aharon Haliva dejará su cargo y se retirará de las Fuerzas de Defensa de Israel una vez que se designe a su sucesor, según informó un comunicado castrense.
Investigación interna en curso
El ataque de Hamás ha llevado al Ejército a iniciar una investigación interna, cuyas conclusiones se espera que sean presentadas al Jefe del Estado Mayor, Herzi Halevi, a principios de junio. Esta investigación busca analizar la respuesta de las tropas antes y después del ataque, así como su despliegue en el terreno y los procedimientos operativos utilizados para neutralizar a los combatientes.
El dolor de un día negro
Aaron Haliva, quien ha servido durante 38 años en las Fuerzas de Defensa de Israel, asumió parte de la culpa por la respuesta lenta contra los milicianos de Hamás que tomaron el control de varias comunidades israelíes y se desplegaron armados en un 3% del territorio. En su carta de renuncia, Haliva expresó su pesar por los acontecimientos y el dolor que lleva consigo desde aquel día negro.
Opinión pública exige responsabilidades
Según una encuesta realizada por el Instituto para la Democracia de Israel entre los días 14 y 17 de abril, el 62% de la población israelí, tanto judíos como árabes, considera que es hora de que los responsables de los fallos del 7 de octubre dimitan. Estas demandas de responsabilidad se producen más de seis meses después del suceso.
Referencia: EFE
