Alcira Beltrán, la madre del futbolista colombiano, Guillermo Denis Beltrán, pidió respeto y mantener reserva por el fallecimiento de su hijo, a tiempo de agradecer a los dirigentes del club Real Santa Cruz y de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) por la colaboración para la repatriación de los restos mortales.
“No quiero especulaciones, no quiero nada, quiero darle la cristiana sepultura, con alegría. Hay momentos en la que uno llora, pero él me da esa fortaleza”, declaró la señora Beltrán, quien llegó el fin de semana a la capital oriental para llevarse a su hijo a su país, donde será enterrado, una semana después de su fallecimiento.
El deceso del atacante colombiano de 24 años generó versiones a su alrededor sobre la asistencia médica, apuntando al club albo y revelando problemas económicos dentro de la institución con una deuda con el primer plantel.
“Me voy con la satisfacción de que Bolivia acogió a mi hijo, nos acogió a mi hija y a mí. Me han apoyado en este momento de dolor, tato la Federación como el club, desde el momento que me dieron la noticia se preocuparon, nos dieron todos los medios para viajar”, declaró Alcira, la tarde de este miércoles, en conferencia de prensa.
“Lo voy a recordar con ese entusiasmo, con el deseo de superarse”, mencionó la señora Alcira, quien, en una de sus charlas con su hijo, recibió la promesa de que un día recibiría una casa propia para darle esa tranquilidad a su familia.
La madre del futbolista compartió facetas y los anhelos del “guille”, como nombraban con cariño al delantero. Denis era fanático del Faustino “tino” Asprilla, mundialista con la Selección Colombia, y como su ídolo quería jugar bajo la divisa de su país y “si no jugaba en Colombia, me contó que quería nacionalizarse para jugar en Bolivia”, recordó la madre, conteniendo las lágrimas.
