El vocero de la Cámara Nacional de Despachantes de Aduanas, Antonio Rocha, aseguró que una solución efectiva para la escasez de dólares en el país es liberar los cupos de exportación. Según Rocha, este sector es fundamental para traer divisas frescas y revitalizar la economía.
«Hemos recomendado al Gobierno en varias ocasiones que no toquemos los dólares de los exportadores, porque estaríamos arriesgando nuestra última carta. Son los únicos que pueden proveer dólares al país», manifestó Rocha.
Efectos negativos en importadores y servicios indispensables
La falta de divisas estadounidenses está afectando a los importadores, quienes no pueden realizar pagos a sus proveedores. Esto también tiene un impacto negativo en servicios indispensables como transporte, seguros, almacenamiento y trabajos portuarios.
Perspectivas económicas preocupantes
Además, se prevé una posible depreciación del boliviano acompañada de inflación. En este sentido, se consideran recursos pendientes de aprobación en la Asamblea Legislativa (créditos externos) como una medida paliativa para esta situación provocada por la escasez de divisas.
Aumento natural en precios debido a depreciación del boliviano
«Al haber una depreciación subyacente ya presente en el mercado, eso afecta e impacta los precios de todos los bienes. Porque cuando la moneda (boliviano) pierde valor adquisitivo disminuye su poder adquisitivo y esto provoca un aumento natural en los precios», destacó Rocha.
Propuestas para solucionar la escasez de divisas
Por su parte, los despachantes proponen liberar las exportaciones sin restricciones en las solicitudes de licencias o autorizaciones previas para el sector oleaginoso. Rocha también mencionó otras sugerencias como establecer un mercado libre de divisas o eliminar el impuesto a las transacciones financieras en el mercado formal. Según él, este impuesto tiene un costo elevado para quienes tienen divisas extranjeras y restringe las transacciones en el mercado financiero.
Perspectiva preocupante y llamado a la acción
Rocha advierte que si no se toman medidas, la situación será «muy grave» y se escapará de las manos del Gobierno. «Esta es una situación indeseable para la economía después de haber tenido una estabilidad tan prolongada», concluyó.