El Gobierno estadounidense aprobó el viernes pasado la venta de armamento a Israel por un valor de 147,5 millones de dólares. Esta es la segunda vez en este mes que la administración del demócrata Joe Biden da el visto bueno a una transferencia militar al país en guerra, sin pasar por el Congreso.
En concreto, el secretario de Estado, Antony Blinken, autorizó la venta de mechas, cargas y otros elementos necesarios para hacer funcionar los proyectiles de 155 milímetros que previamente fueron adquiridos por el Gobierno de Benjamín Netanyahu.
Venta bajo calificación de «emergencia»
«Dada la urgencia de las necesidades defensivas de Israel, el secretario notificó al Congreso que ha utilizado su autoridad delegada para determinar que existía una emergencia que requería la aprobación inmediata de la transferencia», explicó un portavoz de la oficina a los medios.
Esta calificación de «emergencia» supone que la venta no está sujeta a la aprobación legislativa, como suele ser habitual en los casos de transferencias de armamento a países extranjeros.
Blinken toma decisión similar anteriormente
El pasado 9 de diciembre, Blinken tomó una decisión similar al autorizar la venta anteriormente mencionada.
El Gobierno estadounidense lleva meses pidiendo al Congreso que apruebe un paquete de ayuda militar que incluya 61.000 millones de dólares para Ucrania y unos 15.000 millones para Israel. Esto ocurre a pesar del creciente número crítico desde la Casa Blanca respecto a las abrumadoras víctimas civiles del conflicto entre Israel y Hamás en la Franja Gaza.
Elevado número de víctimas en el conflicto
Según datos proporcionados por las autoridades gazatíes, más de 21.000 personas han perdido la vida en el enclave palestino desde que comenzó la guerra el pasado 7 de octubre, tras el ataque sorpresa del grupo islamista contra Israel.
Fuente: EFE
