El Presidente Luis Arce ha instado a las Fuerzas Armadas a llevar a cabo una revisión profunda de la doctrina de defensa del Estado. Según Arce, es necesario adoptar un nuevo modelo de liderazgo militar para hacer frente a los ataques arteros que se presentan en forma de golpes blandos y revoluciones de color, los cuales forman parte de la guerra híbrida cuyo objetivo es debilitar las instituciones estatales y afectar la democracia.
Durante el acto de graduación de Institutos de Formación del Colegio Militar de Aviación y la Escuela Naval Militar, celebrado este sábado en Cochabamba, Arce afirmó que el país se encuentra en un momento crucial ante amenazas que ya no se limitan al campo convencional de batalla, sino que se infiltran en todos los aspectos sociales e institucionales.
La guerra híbrida se manifiesta en diversas dimensiones
El Presidente manifestó que es imperativo comprender estas formas híbridas e irrestrictas de guerra moderna, las cuales se manifiestan en dimensiones como el ciberespacio, lo económico, lo social y lo humano.
Diversas tácticas utilizadas para debilitar la gobernabilidad estatal
Arce también señaló que esta guerra híbrida adopta diversas formas: desde desinformación y propaganda negra hasta ciberataques e influencia por parte de poderes económicos. Incluso fenómenos naturales o sabotajes pueden ser utilizados como armas para debilitar la gobernabilidad estatal.
Bolivia no está exenta de estas amenazas
Además, advirtió que Bolivia no está exenta de estas amenazas debido a sus grandes riquezas como el litio, tierras raras, agua dulce y su ubicación estratégica en Sudamérica. Por ello es necesario contar con Fuerzas Armadas modernas capaces de contrarrestar estas tácticas asimétricas.
La desinformación puede ser tan destructiva como un ataque militar
El mandatario destacó que la desinformación puede ser tan destructiva como un ataque militar directo y la capacidad de discernir la verdad en medio de información distorsionada se convierte en una habilidad crucial.
Nuevas tecnologías y cooperación son clave en este escenario
En este nuevo paradigma de guerra moderna, Arce explicó que es necesario incorporar nuevas tecnologías, fortalecer la ciberseguridad y ciberdefensa, así como cooperar con países amigos. Estos elementos son clave en este escenario de cambios dinámicos.
Defensa soberanía y recursos naturales hacia el futuro
Arce afirmó: «Hoy más que nunca en nuestra historia nos encontramos en un momento crucial, donde la defensa de nuestra soberanía y nuestros recursos naturales se entrelaza con la construcción de un norte estratégico para Bolivia con una visión prospectiva al 2050».
Contribución militar a políticas y estrategias de defensa y desarrollo
Asimismo, el Presidente enfatizó que es imperativo que los diferentes ámbitos militares contribuyan al diseño de políticas y estrategias de defensa, seguridad y desarrollo del Estado. Esto implica aportar activa y decisivamente al logro de los grandes objetivos nacionales permanentes y gubernamentales.
No subordinarse a geopolíticas ni intereses oligárquicos
Arce también hizo hincapié en que el país no puede subordinarse a geopolíticas de ningún país ni someterse a intereses oligárquicos. Tampoco debe ceder ante intereses imperiales relacionados con el control del litio o realizar corredores de exportación que favorezcan el plan Capricornio para aislar al Estado.
Nueva concepción de liderazgo para fortalecer capacidades colectivas
Por último, Arce pidió que se incorpore una nueva concepción de liderazgo a la triada conformada por gobierno, pueblo y Fuerzas Armadas. Esto permitirá fortalecer las grandes capacidades colectivas del bienestar popular expresado en el vivir bien, la propiedad estatal sobre los recursos naturales bolivianos y la integridad territorial frente a los intentos federalistas y balcanizadores de la anti-patria.