Una muestra con danzas autóctonas y folclóricas de Bolivia marcó el inicio de las actividades para la celebración de la fiesta del Gran Poder en 2024, año donde se cumplirán cinco años desde que esta festividad fue reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad y medio siglo desde la creación de la Asociación de Conjuntos Folclóricos del Gran Poder (ACFGP), entidad encargada de coordinar anualmente la entrada.
El evento tuvo lugar en la plaza Murillo de La Paz, donde un total de 25 fraternidades de folcloristas realizaron una demostración de las danzas que forman parte de la Fiesta de Jesús del Gran Poder.
Tres motivos importantes para celebrar
La ministra de Culturas, Sabina Orellana, destacó tres motivos importantes para celebrar esta jornada. En primer lugar, el lanzamiento mismo de la fiesta; en segundo lugar, la conmemoración del reconocimiento por parte UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial en diciembre de 2019; y finalmente, el quincuagésimo aniversario desde la creación ACFGP.
Riqueza cultural y económica reflejada en el Gran Poder
Orellana resaltó que el Gran Poder refleja «la riqueza y diversidad» cultural del país, además del movimiento económico generado por esta festividad. Esta tradición nació a principios del siglo pasado como fiestas indígenas en barrios populares y se convirtió en un desfile folclórico masivo alrededor de los años 1940.
La Fiesta Mayor de los Andes
Conocida también como «fiesta mayor de los Andes», el Gran Poder consiste en un desfile de danzas folclóricas bolivianas dedicado a la imagen católica de Jesús del Gran Poder. Se lleva a cabo anualmente entre fines de mayo y principios de junio.
Destacadas danzas bolivianas
La Morenada es la danza más destacada de la entrada, preferida por los aymaras debido a que les permite exhibir su poder económico con lujosas máscaras, trajes, vestidos y joyas. En el lanzamiento del Gran Poder también se presentaron otras danzas bolivianas como el salay, la kullaguada, el tinku, los tobas, caporales y la Diablada. Esta última escenifica la eterna lucha entre el bien y el mal representados por el arcángel San Miguel y Lucifer. También se realizaron algunos bailes autóctonos.
Protección y promoción del Gran Poder
La ministra Orellana resaltó la labor del Comité de Salvaguarda de la Festividad del Gran Poder, que está preparando un documento para proteger y promover esta fiesta junto con las vestimentas y las danzas folclóricas bolivianas ante los intentos de apropiación por parte de naciones vecinas.
Reconocimiento del origen boliviano
«¿Quién no quiere bailar la morenada o la diablada? Es un orgullo tener estas fraternidades y asociaciones. Solamente nos falta normar cómo vamos a protegerlas. No hay problema con que en otros países se bailen las danzas bolivianas, pero es necesario que reconozcan su origen boliviano» señaló Orellana.
