Más de 3,3 millones de hectáreas de zonas boscosas, matorrales y pasturas secas se han quemado en los 160 incendios forestales registrados en Bolivia en lo que va del año, según informó el ministro de Defensa, Edmundo Novillo.
Informe sobre las afectaciones causadas por los incendios
El ministro compareció ante los medios en la ciudad central de Cochabamba para dar un informe sobre las afectaciones causadas por los incendios este año en el país y las acciones realizadas por las autoridades, así como la ayuda internacional recibida para combatir el fuego.
Cifras y daños ocasionados por los incendios
Detalló que hasta noviembre se han quemado 3.372.369,46 hectáreas y explicó que consideran que «los incendios han concluido», ya que no se reportan más focos de calor y ha comenzado la época de lluvias en el país. De esa superficie dañada, 1,1 millones de hectáreas corresponden a «cobertura arbórea» y 2,2 millones eran matorrales y pasturas secas. La región amazónica de Beni fue la más afectada con 1,9 millones de hectáreas quemadas.
Historial histórico e impacto social
Según datos históricos presentados por el ministro, el año con mayores afectaciones fue 2019 con 5.305.512 hectáreas quemadas; mientras que en 2022 la superficie dañada fue de 4.466.540 hectáreas. Estas cifras son obtenidas mediante un control satelital a través del Sistema de Información y Monitoreo de Bosques (SIMB), que verifica diariamente las áreas quemadas y proporciona informes anuales.
Familias damnificadas y ayuda humanitaria
Se estima preliminarmente que hay 18.194 familias damnificadas por los incendios y se reportaron 133 viviendas afectadas o destruidas por el fuego. Durante el período de junio a noviembre, se registraron 160 incendios en todo el territorio boliviano, siendo las siete de las nueve regiones del país las más afectadas. La región de Beni declaró «desastre departamental».
Acciones tomadas para combatir los incendios
El Gobierno distribuyó 225,75 toneladas de ayuda humanitaria que requirieron una inversión cercana a los 2 millones de bolivianos (más de 285.000 dólares). Además, se agradeció el envío de 2,77 toneladas de ayuda humanitaria desde Chile y la colaboración de bomberos forestales provenientes de Venezuela y Francia.
El ministro destacó la participación activa de 5.605 bomberos forestales bolivianos y la movilización de 56 unidades militares para sofocar los incendios. Se llevaron a cabo operaciones terrestres, aéreas y fluviales para reconocimiento y exploración, así como otras operaciones para descargar agua y extinguir el fuego.
Procesos penales y debate sobre las prácticas de «chaqueo»
Las autoridades han iniciado 19 procesos penales relacionados con los incendios y actualmente hay cinco personas detenidas acusadas presuntamente de provocarlos.
En esta etapa postincendios, el Gobierno está enfocado en la reconstrucción y reforestación de las zonas afectadas, así como en brindar atención a las familias damnificadas. Es importante mencionar que muchos casos atribuyen los incendios a prácticas llamadas «chaqueos», que son quemas controladas realizadas en zonas agrícolas para preparar la tierra para la siembra o el pastoreo.
Indígenas, ambientalistas y políticos opositores han solicitado en varias ocasiones que el Gobierno de Luis Arce anule las normas que autorizan los «chaqueos». EFE