Según una encuesta publicada este viernes 20 de octubre por el diario Maariv, la mayoría de los israelíes considera que el primer ministro, Benjamín Netanyahu, debe asumir públicamente su responsabilidad por los fallos de seguridad que propiciaron los ataques terroristas en el Sur del país el pasado 7 de octubre por el grupo islamista Hamás desde Gaza.
En dichos ataques murieron 1.400 personas, la gran mayoría ciudadanos de Israel, y fueron secuestradas otras 200 de diversas nacionalidades, mientras que la respuesta israelí causó más de 4.100 muertos en la Franja de Gaza.
Demanda persiste incluso entre votantes
En la encuesta, el 80% de los entrevistados afirmó que Netanyahu debe asumir su responsabilidad, cosa que aún no ha hecho públicamente. Esta opinión es compartida incluso por un 69% de quienes lo votaron en las elecciones de noviembre de 2022, en las cuales venció su partido.
Liderazgo sin consecuencias hasta ahora
Hasta ahora asumieron públicamente su responsabilidad por los errores cometidos: el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel, general Herzi Halevi; el director del servicio de Inteligencia interior (Shin Bet), Roen Bar; el ministro de Defensa Yoav Gallant y el titular de Finanzas Bezalel Smotrich. Sin embargo, aún no se produjo ninguna dimisión ni cese en la cadena de mando.
Apoyo a una ofensiva terrestre
En cuanto a la respuesta que Israel debe dar a Hamás, el 65% de los encuestados apoya llevar a cabo una ofensiva terrestre en Gaza, frente al 21% que la rechaza. Incluso un 51% es partidario de ampliarla hasta la frontera con Líbano para combatir al grupo chií Hzibulá, que también lanzó ataques contra territorio israelí.
Ataque simbólico en sede del partido Likud
Por otra parte, este viernes apareció manchada con sangre falsa y con las paredes cubiertas con fotos de algunos de los rehenes tomados por palestinos del grupo Hamás la sede en Tel Aviv del partido Likud. Según medios israelíes, esta acción fue cometida anoche y sus autores, hasta ahora desconocidos, quieren enviar un claro mensaje: Netanyahu y su gobierno son culpables de las numerosas víctimas del ataque. Este ataque desencadenó una guerra entre Israel y Hamás centrada en Gaza, pero con repercusiones tanto en Cisjordania como en el Norte israelí cerca de la frontera con Líbano.
Cuestionamientos al Gobierno israelí
En los últimos días se registraron protestas contra la actitud del Gobierno israelí, que fue acusado en particular de cometer diversos errores en materia de seguridad que propiciaron el ataque sin precedentes de Hamás. En el caso particular de los rehenes, las familias acusan a Netanyahu de poca agilidad y eficacia en la gestión del caso y de facilitarles poca información.
Fuente: EFE