Técnicos del Ministerio de Salud advierten sobre la importancia de desinfectar el agua, especialmente en regiones afectadas por la escasez hídrica. Destacan que la seguridad alimentaria se ve directamente influenciada por prácticas como la desinfección del agua para el lavado de frutas y verduras, así como la limpieza meticulosa en la preparación de alimentos.
Según el técnico del Programa Salud Ambiental, Pedro Medina, en zonas donde no se conoce el origen del agua, el uso de hipoclorito de sodio (lavandina) puede ser una solución eficaz. Recomienda agregar una gota de lavandina por litro de agua y sumergir los alimentos en ella durante 20 minutos para neutralizar posibles bacterias.
Riesgos asociados al consumo de alimentos no desinfectados
Medina destaca que consumir alimentos no desinfectados puede provocar problemas diarreicos, subrayando la necesidad crítica de estas medidas, especialmente en áreas con escasez de agua donde se recurre a cisternas, pozos y arroyos sin tratamiento.
Cuidado con utensilios contaminados
Javier Flores, profesional Técnico del Programa de Enfermedades Transmitidas por Alimentos, añade que es esencial limpiar los utensilios, especialmente los de madera, para evitar la acumulación de bacterias. Advierte sobre la «contaminación cruzada» y aconseja no utilizar el mismo utensilio para cortar carne y verduras.
Mantenimiento de utensilios y ollas
Flores insiste en mantener limpios los utensilios y las ollas de cocina, sugiriendo el uso de lavavajillas biodegradables para preservar el medio ambiente. Destaca que el detergente en polvo puede dejar partículas en los recipientes.
Higiene personal como medida preventiva
En un último recordatorio, los técnicos subrayan la importancia de la higiene personal, instando a la población a lavarse las manos adecuadamente antes de manipular cualquier tipo de alimentos. Estas medidas simples, según los expertos, desempeñan un papel crucial en la prevención de enfermedades relacionadas con la alimentación y en la preservación de la salud pública.
